Así lo dice la canción, habla de egoísmo, rencor, reproches, habla de una persona rota, de alguien con armadura, de sufrimiento, alguien incapaz de ver el amor que tiene entres sus manos, y que le busca defectos, resguardándose en el miedo.

Aquel que se aventó un día y salió herido, y que no se da la oportunidad de volver a amar así, quien no ama de manera sana, quien tiene el amor enfermo, quien no confía en sí mismo y ocupa una serie de técnicas y estrategias para lograr su objetivo, manipulando la verdad.

Imaginemos por un momento a una persona lastimada, a quien se le vuelve a presentar la oportunidad de amar, que sin buscarlo, esperarlo o planearlo, encuentra aquello que lo hace sentir como niño en juguetería, que provoca que su corazón se acelere, y sienta que ha llegado a un puerto seguro después de naufragar tanto tiempo como tiene memoria, pero, recuerda lo que le ha dolido una perdida, el sufrimiento que le ha provocado la experiencia, y el conocimiento previo del ser humano, entonces, decide hacer de su amor una guerra, un estire y afloje, olvidar la mayor parte del tiempo su sentir y negar su instinto, condenándose a vivir en el temor e incertidumbre, destruyendo todo a su paso.

Llora, se desespera, se siente vacío y perdido, aun así, no hace nada, porque se protege, busca la huida, rebaja sus sentimientos, justifica sus actos, se ampara, en el deseo, cuando se descubre soñando despierto, comienza a idear la forma de sabotear su felicidad y desde su punto de vista no salir lastimado.

Si alguna vez  te sientes así, piensa en algo superior a ti, que te ha dado ese regalo del amor, y en lo que te diría al ver como lo desperdicias, piensa en cada segundo de felicidad que pierdes, en cada caricia que recibes a través de un sin número de capas que te impusiste como armadura, en lo que destruyes día con día, en lo mucho que deseaste ser amado así, y que ahora no puedes responder, el amor existe, es la fuerza y energía más grande hasta ahora descubierta, la única que no podemos explicar, la única capaz de traspasar dimensiones, hay miradas, emociones y reacciones que no se mienten, echa un vistazo, reconócelo y valóralo, no te pierdas esa oportunidad, porque si algo es seguro en la vida es que te vas a morir, guárdalo, úsalo, atesóralo, toma de nuevo el riesgo, cuídalo, cultívalo y agradece.

ACLARACIÓN                                                
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.

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