Qué tal mis queridos lectores, el día de hoy les traigo la segunda entrega de la plática tan amena que tuve con Eduardo González López, director técnico hidalguense egresado de la Escuela Nacional para Directores Técnicos (ENDIT).

Para esta parte nos enfocamos más en los retos y dificultades que existen dentro del futbol en general y en lo particular de las divisiones inferiores. Espero que lo disfruten tanto como yo.

Estoy seguro que, así como yo, muchos de ustedes se preguntan qué es lo que le enseñan a un director técnico durante su formación. Aquí Edgar nos cuenta:

Es como una carrera que tiene cuatro semestres, que en este caso serían los módulos. Cada módulo te va a permitir dirigir en cierto nivel profesional. Es decir, el módulo uno te permite dirigir academias de futbol, el segundo módulo te permite dirigir categorías Sub-13 y Sub-15, el tercero te permite dirigir Sub-17, Sub-20 y Liga Premier y el cuarto módulo te permite dirigir en el Ascenso MX, Liga Mx y Liga Mx Femenil.
Ahí las materias nos enseñan desde desarrollo técnico, que es donde ves los fundamentos técnicos que deben tener los jugadores, como recepción, conducción, golpeo, perfiles, fildeo. Mientras vas avanzando de módulo se va haciendo un poquito más complejo porque ya te enseñan a hablar de sistemas de juego, de formaciones, de funciones y de roles de los jugadores de acuerdo a cada sistema y de acuerdo a cada posición.
Está (la materia) Metodología del entrenamiento, que se basa más en las cargas físicas para que puedas ir llevando progresivamente a los jugadores para evitar las lesiones musculares y vayas programando los entrenamientos de manera correcta y sepas qué hacer de acuerdo los días de la semana basándose en la etapa donde estés (pretemporada, etapa competitiva, liguilla o terminando la temporada).
También se lleva la materia de Psicología.  El tema mental (de los jugadores) ha cobrado mucha fuerza, saber acercarse al jugador, saber hacer click con él, saber que no tienes que llegar a imponer a un equipo, sino que tienes que llegar a convencerlos, a enamorarlos con tu metodología, con tu forma de jugar y a lograr que los jugadores se compenetren contigo, con la idea de juego y que puedan llevarlo de la mejor manera posible.
Y así como te estoy hablando de estas materias, (también está) Medicina del Deporte, donde te enseñan a grandes rasgos qué hacer en caso de que tengas algún jugador lesionado, no para que tú como tal lo saques adelante con la rehabilitación o lo cures, pero sí para que tengas una idea de tratar de prevenir las lesiones y una vez que el jugador regrese de su lesión tú lo vayas reincorporando a la actividad de manera progresiva.
Quizá lo que menos te enseñan los libros de dirección técnica y los profesores es la cuestión del manejo de grupo, es la cuestión de saber llevar al jugador, porque ya son temas que solamente te los da la vivencia y la experiencia de estar al frente de grupos, pero ahí en la ENDIT sí te dan todos los términos, se te da mucha teoría y obviamente te ayudan también ahí a practicarlo.

 

Con esa preparación, es normal que hoy en día se hable de técnicos todo terreno, a los que se les exige no solamente dirigir, sino ser un gestor de lo que pasa alrededor de su equipo.

El director técnico tiene que saber de todo, no solo de futbol, y como lo dices bien, sí es un todo terreno. Evidentemente que si domina el futbol perfecto, porque esa es su (primera) línea de batalla, pero el técnico tiene que saber también de biomecánica, del comportamiento físico e interno del cuerpo, tiene que saber un poquito de manejo de grupos, de la vida. No es que tenga que ser un súper sabio de 90 años, pero sí tiene que saber detalles que hagan convencer al jugador, porque mira que a lo único que se rinde el jugador es ante el conocimiento de su cuerpo técnico, porque podrás (haber sido) jugador profesional y podrás haber jugado futbol en el mejor nivel y ser un fuera de serie, pero transmitirlo como entrenador estamos hablando ya de otro rubro, de otras funciones, de otra manera. Ante lo único que se rinde el jugador es ante el conocimiento.

 

Otro aspecto interesante sobre el rol de un Director Técnico es el armado de su equipo previo a iniciar la temporada. En divisiones estelares está por demás sabido que existen visores, un presupuesto para fichajes y representantes de por medio que incluso ofrecen un catálogo de jugadores; sin embargo, en la inhóspita atmósfera de la Tercera División, el armado de un equipo es muy diferente, sobre todo cuando de clubes modestos hablamos.

(Primero está) la capacidad de alcance que se tiene por medio de las redes sociales para estar invitando y promoviendo las visorias. Se hace primero un proceso de visorias (a nivel estatal o regional) en donde se le informa a la población en general que cumpla con los requisitos de la edad, a asistir en una fecha y lugar determinado, entonces el cuerpo técnico va y hace un proceso muy rápido de registro donde pide datos generales.
Entonces tú de ahí vas seleccionando qué jugadores se van acoplando a un modelo de juego. Eso es lo ideal. A veces en las terceras (divisiones) nos vamos por otros lados, a veces en las terceras juegues o no juegues, pero si tienes dinero para pagar lo que te estoy pidiendo, estás dentro. Tristemente así se ha convertido el futbol hoy en día y también hay que mencionarlo.
Cuando se tiene la oportunidad y se tienen los recursos tú puedes hacer tu equipo a tu gusto, en mi caso con CEFOR Chaco Giménez puedo decirte que hubo una combinación, porque como institución se les pedía una cantidad de registro, pero solo se les pidió a los que futbolísticamente nos convencieron más, entonces tú vas con tu lista de jugadores, los vas observando y vas desechando o agregando opciones que sabes que sí te pueden ayudar, entonces se hace el grueso del equipo con el que tú más o menos quieres empezar la pretemporada, digamos 35 jugadores. Lo ideal es que tengas dos o tres en cada posición.
(Una vez que) haces ese grueso del equipo, a ellos es a quienes les das las condiciones, y les dices “sabes qué chico, aquí no vas a pagar nada, todo es dado por parte del club y tú solamente tienes que responsabilizarte, cumplir y listo” o también “sabes qué, la cuota de tu registro te incluye además del registro como tal, entrenamientos, uniformes y es tanto, si tienes la capacidad económica de solventarlo perfecto, estás dentro, si no ni modo”, porque tenemos que buscar quién sí. Desafortunadamente o afortunadamente así es esto ya, hay algunos casos en los que no juega absolutamente nada, pero tiene un potencial económico que le alcanza para registrar a él y a cinco más, entonces bienvenido sea. Créeme que es así.
En CEFOR Chaco Giménez tomamos una inercia gracias al entrenador que fue el que me dio mi primera oportunidad, Efraín Olvera mejor conocido como “Chícharo”, al que le tengo que dar el crédito, se aprovechó toda la inercia que él ya tenía, toda la experiencia, todos los contactos, toda la gran fama del gran entrenador y sobre todo la gran persona que es, y de nuestra parte los poquitos años que te comenté que había estado en Satélites y la oportunidad de Piedras Negras, me aferré a los jugadores que conocía para ofrecerles esta opción de CEFOR Chaco Giménez, obviamente que no todos vinieron, pero lo ofrecí a los jugadores que en ese momento sentí que podían aspirar a ser parte del equipo.

 

A pesar de que este sistema pudiera parecer abusivo, lo cierto es que en las divisiones inferiores de nuestro país la solvencia económica es un tema constante en los cientos de equipos que la conforman, por lo que las directivas buscan la forma de mantener el proyecto a flote, incluyendo las famosas cuotas.

Dudo mucho y no he sabido todavía la clave de cómo sacarle provecho económico a un club de tercera, porque en verdad, los precios de Federación (Mexicana de Futbol) son elevados. Mantener un equipo de tercera son gastos y gastos por donde tú me digas. 
Si no tienes cancha de entrenamiento tienes que rentar una, si tienes cancha de juego bien, sino tienes que rentarla, si tienes jugadores tienes que decidir si ellos te pagan un registro o no, el registro oscila según el último dato que tengo entre los 2800 y los 3200 pesos. (Hay que pagar) un registro por jugador y por cuerpo técnico que te cobra la federación. Tu preparador físico, tu auxiliar, tu doctor, (todos esos registros) te exigen un costo.
Además, tienes que pasar una prueba donde avalan (la Federación Mexicana de Futbol) tu sede para poder jugar, pues tiene que tener una serie de requisitos de pasto, de tribuna, de enmallado, de vestidores, y para que alguien vaya y te haga esa prueba es otro costo.
También pasa que compré la franquicia y se llama Cocodrilos FC y la quiero cambiar porque ahora quiero que se llame Hidalgo FC, entonces eso te cuesta veintitantos mil pesos. Si quiero cambiar mi logo, te sale en 30 mil pesos, pero si también quiero cambiar mi horario porque en Cocodrilos FC jugaba a las 5 pm y yo quiero jugar a las 12, bueno, pues te sale en otros 15 mil pesos. Es carísimo. Los arbitrajes oscilan también entre los 7 mil y 8 mil pesos hasta donde yo me quedé.
Todo, absolutamente es dinero, todo tiene un costo ante la federación. Son muchos factores que te exigen exprimir la economía de un club, por lo tanto, los equipos de tercera división en su gran mayoría se ven obligados a tener que pedirle al jugador diferentes cuotas, algunos son leves y algunos sí exageran. Te puedo comentar que me he enterado de franquicias de tercera y hasta de segunda que cobran arriba de 40 mil o 50 mil pesos a cada jugador por su registro.

 

Como acaban de leer, ser un Director Técnico y desenvolverse en el mundo del futbol nacional no es cosa fácil, existen diferentes retos y dificultades para entrar a un sistema que muchas veces carece de oportunidades para los nuevos talentos por dar cabida a personajes manchados por el influyentismo.

Yo les diría (a los que se quieren dedicar a esto) que de todas las veces que escuchen “no se puede”, “no llegaste”, “si no llegaste como jugador no lo harás como DT”, de todas las veces que escuchen eso de sus familiares cercanos, de sus amigos, de sus novias, de lo que me digas, esas palabras las utilicen como combustible para alcanzar sus sueños, porque los sueños únicamente llegan si los sigues trabajando, si constantemente te vas formando, si tienes un hábito de vida personal. Valora a las personas que van a estar ahí hasta el final.
Tú eres tu máxima arma. Tú, tu mente, tu espíritu y tu objetivo son los únicos aliados que van a estar contigo.

¡Hasta la próxima!

ACLARACIÓN                                              
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.

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