El día de hoy, les contaré la turbia y difícil vida de quien está a punto de convertirse en la gimnasta más condecorada de Estados Unidos. Este Astro comandó a la selección de su país al liderato en el medallero de su disciplina durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, sin embargo su historia personal está marcada por muchas situaciones que fácilmente la pudieron hacer caer de las barras de la vida.

Simone Biles es la mejor gimnasta del planeta, desde su debut profesional en 2013 ha ganado una serie impresionante de palmares entre los que destacan cuatro oros olímpicos (uno de ellos en categoría general individual) y un bronce, además de tres oros en campeonatos mundiales individuales y dos en quipo.
Es especialista en el suelo, tanto así un salto fue nombrado en su honor. Al principio de su carrera, hacía un salto mortal increible, “El Biles”. Consta de un doble mortal en plancha que termina con medio giro y se rumora que dicho movimiento no está al alcance de cualquiera.
Nació el 14 de marzo de 1997 en Columbus, Ohio y desde los 15 años estudió en casa para dedicar más tiempo a la gimnasia y al terminar el bachillerato, ya era dos veces campeona mundial de su especialidad.
Simone y sus tres hermanos tuvieron una infancia muy difícil debido a las adicciones de sus padres y durante los siguientes tres años, los niños pasaron de casa hogar en casa hogar hasta que sus abuelos adoptaron a Simone y su hermana menor Adria y las criaron en Houston, mientras que su tía abuela adoptó a sus hermanos mayores.
Durante una excursión a un centro de gimnasia, Biles estaba imitando a los jovenes que ahí entrenaban cuando el entrenador la vio. “El gimnasio envió una carta a casa pidiendo que me uniera al equipo de trampolín o al de gimnasia artística”, relata Simone en el sitio web de la Federación de Gimnasia de EEUU.
Esa experiencia encauzó la carrera de la medallista olímpica y su hermana menor también practica el deporte. En contraste a ellas se encuentra su hermano mayor, Tevin. Fue acusado a mediados de 2019 de un triple asesinato mientras era miembro activo en servicio del Ejército estadounidense.
my brother tevin | everyone says we look like twins but we don’t see it pic.twitter.com/WnljD48rMQ Simone Biles (@Simone_Biles) September 11, 2017
Fue detenido en Georgia y los cargos que enfrentó eran homicidio, homicidio involuntario, asalto y perjurio en una fiesta del 31 de diciembre de 2018. Cuando Simone se enteró de la noticia tuiteó: “Comiéndome mis sentimientos. No me dirijáis la palabra” y pocos días después fue capaz de expresar sus sentimientos al respecto:
“Me duele el corazón por todos los que están involucrados, especialmente por las víctimas y sus familiares. No hay nada que pueda decir para sanar el dolor, pero quiero expresar mis más sinceras condolencias a todos los afectados por esta terrible tragedia”.
Cuando parecía que los problemas de la infancia habían terminado, Biles reveló en Twitter, como parte del movimiento Me Too que fue víctima de abuso sexual por parte del ex médico del equipo olímpico de gimnasia en su país.
El culpable, Larry Nassar, fue condenado a 60 años de cárcel por posesión de pornografía infantil y a 175 por haber abusado sexualmente de más de 140 mujeres.
“La mayoría me conocéis como una chica feliz, risueña y enérgica. Pero últimamente me he sentido rota y cuanto más trato de apagar esa voz en mi cabeza, más alto me grita. Ya no tengo miedo de contar mi historia. Yo también soy una de las supervivientes que sufrió abusos sexuales por parte de Larry Nassar”, escribió la gimnasta para el movimiento Me Too.
Feelings… #MeToo pic.twitter.com/ICiu0FCa0n Simone Biles (@Simone_Biles) January 15, 2018
Simone relató que Nassar se aprovechó de su confianza: “Es un comportamiento completamente inaceptable, asqueroso, y abusivo; especialmente porque vino de alguien en quien me dijeron que confiara”, escribió en su declaración. Además, en una entrevista, Biles culpó a la Federación de Gimnasia “Literalmente tenían un trabajo que hacer y no pudieron protegernos”.
DEMANDA MÚLTIPLE CONTRA EL COMITÉ OLÍMPICO DE EEUU
La superestrella de la gimnasia se unió las deportistas que el pasado lunes 15 de junio presentaron una demanda formal contra el Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos (USOPC, por sus siglas en inglés) por abuso sexual.
El inscribir su nombre en la demanda, la obligará a presentarse ante los tribunales de justicia junto a otras deportistas olímpicas como Madison Kocian, Aly Raisman, McKayla Maroney, Kyla Ross, Jordyn Wieber y Jamie Dantzscher y otras 140 víctimas de agresión sexual del mayor depredador sexual del deporte estadounidense, Larry Nassar.
La moción fue presentada en la corte federal de Indianápolis y quiere provocar que testifiquen, entre otros, Susanne Lyons, la actual presidenta de la USOPC; Scott Blackmun, exCEO de la organización, y Alan Ashley, el exjefe de rendimiento deportivo.
El pasado febrero, los abogados del organismo rector del deporte (USA Gymnastics) ofertó 215 millones de dólares como solución al caso federal. Pedían que cualquier reclamación actual o futura fuese desechado y que los directivos actuales y anteriores de la organización no tendrían que declarar. Las 156 víctimas de Nassar rechazaron el trato.
La jueza Robyn L. Moberly, del Tribunal de Bancarrotas de Estados Unidos en el Distrito Sur de Indiana aseguró que la federación de gimnasia recibiría un “beneficio enorme” con dicho acuerdo de solución que libera a la organización de cualquier demanda, así que va para largo este caso y seguramente muchas cabezas caerán.
Si algo pudiéramos tomar como ejemplo de nuestro vecino del norte es su sistema de justicia, rara vez se les escapa algo y aunque la presión mediática pudo influir en este caso colectivo, no debe ser ignorado, puede ser precedente y marcar un hito en la historia deportivo-jurídica no solo de Estados Unidos, si no para el deporte mundial.
No es un secreto que el abuso sexual aprovechándose de la confianza en organizaciones que tratan con niños es muy común y aunque muy poco denunciado, como todas las agresiones de esa índole, es algo que debe terminar.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.
