Durante un periodo de seis años denunciaron 114 feminicidios en la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJEH), aunque, ante la desconfianza de los ciudadanos hacia las autoridades y la percepción de impunidad o porque fueron clasificados como homicidios dolosos, seguramente la cifra es mayor.
Al tomar en cuenta el homicidio de mujeres, no clasificado como feminicidio, la cifra incrementa a 201 asesinatos.
Asfixia, mutilación, golpes, quemaduras, traumatismo, y también lesiones provocadas con arma blanca y de fuego son las principales causas de la muerte de las mujeres, informó la procuraduría estatal a través de una solicitud de información para el periodo 2013-2018.
Del total de homicidios contra mujeres, cinco fueron mutiladas en Hidalgo: tres en 2012 y dos durante 2015, todas mayores de 18 años de edad.
Tales datos se desprenden de más de 500 solicitudes de información hechas a todas las fiscalías del país por la organización Mexicanos contra la corrupción y la impunidad.
La investigación encontró 37 homicidios dolosos contra mujeres en Hidalgo sin tipificar como feminicidios, por lo que esos crímenes no fueron analizados con perspectiva de género y en algunos casos los culpables habrían recibido penas menores.
A nivel nacional, 46 de cada cien asesinatos de mujeres que debieron ser considerados feminicidios sólo son investigados como homicidios dolosos.
Además, de abril de 2013 a octubre de 2017 en Hidalgo, los feminicidios sucedieron principalmente en domicilios, ocurrieron por asfixia y fueron cometidos en mayor medida por parejas sentimentales.
Principalmente fueron encontradas en viviendas y en menor medida en predios rústicos, zanjas, canaletas, paradero del transporte público, hotel e inmueble en construcción.
Incluso, la procuraduría estatal tiene registro de dos feminicidios ocurridos en penales del estado durante 2015 y 2017.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.
