Faltan muy pocas horas para conocer a los ganadores del premio Óscar de la Academia en su 91ª edición. No tengo la menor duda que esta entrega tendrá un alto nivel de audiencia, debido a las polémicas y debates generados en la  víspera de la gala de premiación. 

Ya todo cinéfilo y gente del medio cinematográfico han hecho sus predicciones para la ceremonia del domingo 24 de febrero. Para el grueso del público mexicano la predilecta es Roma, de Alfonso Cuarón, que acapara 10 nominaciones, mismas que la película La Favorita (The Favourite), dirigida por el griego Yorgos Lanthimos, con extraordinarias actuaciones de Olivia Colman, Emma Stone y Rachel Weisz. Esta producción cuenta con un magnífico trabajo en el diseño de producción y en el vestuario.

Un título que me ha causó sorpresa ver nominado a mejor película junto a las dos anteriores es Nace una estrella (A Star is Born), cinta que marca el debut como director del carismático Bradley Cooper, protagonizada por él mismo, junto a Lady Gaga. Esta es la cuarta adaptación cinematográfica del mismo título. 

La primera versión es de 1937, dirigida por Willliam A. Wellman; estuvo nominada a ocho premios Óscar, ganadora de mejor guion. La segunda versión, de 1954, obra del enorme George Cukor; fue nominada en seis categorías de los premios de la Academia, incluidos mejor actriz para la inolvidable Judy Garland y mejor canción original, por The Man that Got Away.  La tercera versión es de 1976, estuvo nominada en cuatro categorías. Dirigida por Frank Pierson, ganó mejor canción original con Evergreen, compuesta e interpretada por la protagonista Barbra Streisand. 

Para esta última versión, Ha nacido una estrella, tiene ocho nominaciones de la Academia. Desde luego, mejor canción original, por Shallow, de Lady Gaga, para mí, lo mejor de la película es la interpretación musical de la cantante, quien también está nominada a mejor actriz. La nominación que me sorprende es a mejor guion adaptado. Me queda claro que para Hollywood y la Academia, siguen vigentes las viejas y gastadas fórmulas de antaño. De las cuatro versiones, yo me quedo con la protagonizada por Judy Garland, es espectacular.

Películas como Roma, Green Book, La Favorita o Vice, rompen con esquemas, proponen, van más allá de fórmulas ya probadas, que quizá sean funcionales para cumplir necesidades de mercado. Pero como espectador, agradezco ver los espectaculares diseños de producción de estos cuatro filmes, su diseño sonoro, actuaciones memorables e historias que no habíamos visto antes en cine.

La 91ª entrega del Óscar será mexicana, no sé cuántas estatuillas se lleve Roma, pero el hecho de tener diez nominaciones, hace que la noche del 24 de febrero en Hollywood, sea mexicana.

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