El asesinato del alcalde de Pacula Alejandro González Ramos durante el proceso electoral en Hidalgo puso en alerta a las autoridades, luego que los institutos electorales, local y federal, descartaron focos rojos en las campañas. Este hecho violento se suma a los asesinatos de los exalcaldes de Mixquiahuala, Miguel Ángel Licona Islas, y de Nopala, Hermilo Bravo Leal; asi como del exregidor de Cuautepec, Carlos Ortega Reyes.
Los priistas guardaron los globos y el confeti para mejor ocasión luego que su candidato presidencial José Antonio Meade suspendió el evento que tenía programado en Hidalgo. La renuncia de su dirigente nacional y las encuestas que ubican a los tricolores en un lejano tercer lugar de la contienda afectan la autoestima de sus militantes.
Algunos candidatos de Morena y Partido del Trabajo desconocen los municipios que conforman los distritos electorales que buscan representar en el Congreso local y federal, lo cual demuestra la falta de capacidad para conocer las necesidades de la ciudadanía.
