San Francisco del Rincón, Guanajuato.- Integrantes del sector zapatero se manifestaron este viernes frente Cereso para exigir la liberación de Alejandro Arellano, detenido la semana pasada durante los operativos de la Fiscalía General de la República (FGR), en la colonia Santa Rita.
En entrevista con AM, José Luis García León, líder del gremio zapatero, aseguró que Alejandro es inocente y fue detenido de manera injusta.
“La verdad los fabricantes somos muy solidarios con nuestros compañeros, estamos en una lucha permanente porque desgraciadamente el gobierno no ha atendido las causas que están generando el desempleo y la problemática que está viviendo la industria del calzado”.
“Desgraciadamente a nuestro compañero Alejandro en el último operativo lo detuvieron, es una persona de las más tranquilas de todos. Ese muy trabajador, es padre de familia, al día siguiente de que lo detuvieron, tenía el compromiso de la primera comunión de su hija y no pudo asistir porque desgraciadamente lo detuvieron, desgraciadamente para los ciudadanos que nos dedicamos a trabajar”, comentó el líder zapatero.
José Luis detalló que Alejandro fue detenido de forma violenta, incomunicado por varias horas y presuntamente golpeado. “Hay videos donde se ve cómo lo agreden al momento de la detención, lo golpean y lo suben a una patrulla. Estuvo incomunicado hasta las 9 de la mañana del mismo día; su familia no sabía dónde estaba”, denunció.
Imagínate lo que vivió a solas, conociendo cómo actúa el gobierno contra la ciudadanía. No me quiero ni imaginar la golpiza que le pudieron haber propiciado o incluso obligarlo, por medio de torturas, a dar unas declaraciones que la verdad no son reales. ¿Por qué tú sabes que bajo tortura te hacen hablar hasta que tú eres Jesús?”, compartió.
La audiencia para determinar la situación jurídica de Alejandro está programada para la 1 de la tarde. Según García León, inicialmente se le acusaba de disturbios y daños, pero ahora se le imputan delitos como crimen organizado y coparticipación con la delincuencia.
“No se me hace justo. No se trata de agarrar a alguien y luego inflarle delitos para justificar una detención. Lo están usando como chivo expiatorio”, expresó.
Alrededor de 80 personas, familiares, amigos y colegas del detenido, marcharon en caravana desde el bulevar Juventino Rosas hasta el Cereso. Portaban cartulinas con mensajes como: “Alejandro es gente de trabajo”, “Justicia para Alejandro”, “La dignidad no se gatea, se respeta”, y una cartulina que llamaba particularmente la atención, sostenida por una niña: “Justicia para mi papá”.
El líder del gremio afirmó que tras conocer el resultado de la audiencia se reunirán para definir las acciones a seguir.
AM