Durante la temporada de “cuaresma”, el consumo de productos del mar espera un importante aumento, lo mismo que el precio de estos alimentos, los cuales con el paso del tiempo se han convertido en un verdadero lujo para las familias cuevanenses, que se ven obligadas a buscar otras opciones de alimentación.
Para muchas familias, la llegada de la cuaresma significa también un cambio de hábitos en su alimentación.
Los precios del pescado varían y las especies más baratas son el bagre, el cual se hace en caldo y cuesta 60 pesos el kilo, mientras la mojarra y la trucha cuestan 70 pesos el kilo y son para freir, pero hay algunas que su costo es verdaderamente inalcanzable para las familias, como el caso del guachinango que llega a los 130 pesos.
Mientras que en el caso de los mariscos, los precios son aún más altos, como el caso del camarón el cual, el más económico tiene un costo de 170 pesos y otros de 180, 190 y los 250 pesos.
Otros productos también ha aumentado su valor, como en el caso de la jaiba que cuesta 130 pesos, el calamar 120 y el kilo de ceviche en un promedio de 80 pesos.
Los productos que más demandan tienen son el pescado, el filete de pescado, el camarón, pulpo, ostiones y luego el ceviche, ya sea preparado o bien sin coser.
