En lo que va del año ocho casas de empeño irregulares han cerrado en Dolores, una de las razones es que “no son negocio”, informó la titular de Desarrollo Urbano, Eréndira Judith Vidales Esparza.
Ahora sólo quedan seis, de las cuales dos no tienen sus papeles en regla. “Vamos a visitarlos para que regularicen su situación”, aseguró Vidales Esparza.
Las desaparecidas eran “pequeños locales que no funcionaron, o al menos eso es lo que se percibe, los verdaderos motivos no los sé”, dijo.
Además, todas las casas eran irregulares, excepto una, ubicada en la avenida Mariano Balleza.
Señaló que se hizo una campaña de regularización de casas de empeño “pero ha sido complicado porque no han hecho caso. Pensamos en sancionarlos si no cumplen”.
Por ley, las casas de empeño deben tener permisos de la Secretaría de Hacienda, Protección Civil y deben cubrir el pago de Derecho de Anuncios, lo que muchas casas se negaban a pagar.
Vidales Esparza señaló que las casas de empeño no reguladas representan un riesgo para la ciudadanía pues “muchas veces aceptan artículos robados, es un riesgo social y económico pero es responsabilidad de las personas que acuden a los establecimientos”.
