Guanajuato.- Los casos atendidos por Seguridad Pública sobre violencia intrafamiliar en Moroleón, Uriangato y Yuriria repuntaron un 24.35% respecto a lo registrado el año anterior. Entre los tres municipios se acumula un total de 572 reportes atendidos hasta agosto de 2025.
Este incremento es significativo, pues en el mismo periodo de 2024 se reportaron 460 casos. Cifras que muchos habitantes consideran alarmantes y que preocupan a las autoridades.
Yuriria y Uriangato son los que concentran más atenciones de violencia intrafamiliar, con 266 y 260 casos, respectivamente, en este año. Lo más recurrente son las agresiones entre parejas, así como agresiones a hijos y riñas entre familiares, situaciones que en la mayoría de los casos se canalizan al DIF.
Se están trabajando nuevas estrategias con apoyo del Gobierno del Estado, la violencia intrafamiliar es un tema muy común actualmente, pero es porque ahora sí se denuncia y se canaliza a las víctimas, se brinda seguimiento, pero tenemos que trabajar en más pláticas o actividades que incluyan a la familia”, indicó Mónica Pérez, directora del DIF de Yuriria.
La Dirección de Seguridad Pública de Uriangato informó que también se brinda atención adecuada en estos casos, pues destacan que los elementos ya cuentan con capacitación para actuar y dar protección a las víctimas de violencia intrafamiliar.
Denuncia ciudadana impulsa el aumento en las estadísticas
Fernando Zamudio, presidente del DIF de Moroleón, destacó que en Moroleón hay pocos reportes de estos casos en comparación con los otros dos municipios, pues en 2024 fueron 37 reportes atendidos y en 2025 van 46. “Invitamos a la población a reportar al 911 cualquiera de estas situaciones de violencia intrafamiliar para dar la atención adecuada, no debemos callar esta violencia”.
Los ciudadanos de estos municipios metropolitanos afirman que la violencia intrafamiliar es de lo más común en la zona desde hace muchos años, pero atribuyen el repunte de casos registrados a que actualmente sí se reportan estos hechos.
Las cosas ya no son como antes, ya las familias no se aguantan muchas cosas que hace años sí. Lo que sí es preocupante es que la violencia se dé entre parejas, entre hijos, entre hermanos, estamos mal como sociedad y eso tiene que cambiar porque a veces hasta se andan matando entre familias”, opinó Karina Morales, habitante de Uriangato.
Libia presentó reforma en materia de violencia familiar
La gobernadora de Guanajuato, Libia García Muñoz Ledo, presentó el pasado 30 de septiembre de 2025, una iniciativa de reforma al Código Penal del estado enfocada en la violencia familiar, con el objetivo de endurecer las penas contra los agresores. La propuesta legislativa busca eliminar la posibilidad de que los responsables de este delito puedan evitar la prisión a través de beneficios procesales.
La iniciativa establece que las personas sentenciadas por violencia familiar no podrán ser beneficiadas con la suspensión condicionada del proceso penal, una figura legal que les permitiría salir libres bajo ciertas condiciones. Esta medida busca asegurar que los agresores enfrenten consecuencias penales más estrictas y se eliminen las facilidades para evadir la cárcel.
La mandataria estatal argumentó que el daño infligido a las víctimas, que incluye mujeres, hijas e hijos, es permanente, por lo que la sanción para los responsables debe ser igualmente rigurosa. Enfatizó que la sanción penal no debe ser cambiada por ningún tipo de beneficio que exima al agresor de la responsabilidad de sus actos.
Según cifras oficiales, Guanajuato ocupa el cuarto lugar nacional en violencia familiar, con 11,256 víctimas de enero a agosto de 2025, una tasa de 172.2 víctimas por cada 100,000 habitantes, por encima de la tasa nacional de 135.2.
Aumenta violencia filio-parental en la capital
El año pasado, en Guanajuato capital, se reportaron más de 1,900 casos de violencia familiar de todo tipo ante la Policía Municipal, según informó Samuel Ugalde García, secretario de Seguridad Pública Municipal.
De estos, un porcentaje importante involucra agresiones de hijos a padres, menores de edad o adultos mayores. Los agresores son tanto hombres como mujeres, y en algunos casos, incluso entre parejas homosexuales, tanto de hombres como de mujeres.
A pesar de ello, la mayoría de los casos siguen siendo de violencia de género (hombres hacia mujeres dentro del contexto de matrimonio o pareja).
AAK
