León.- A los 78 años, falleció hoy, de un infarto al corazón, el señor Rogelio Ignacio Díaz Torres.
Mañana a las 7 de la noche también se ofrecerá una misa para despedir sus cenizas, mismas que serán depositadas en el templo de Nuestra Señora de San Juan de los Lagos.
El recordado empresario nació en León el 3 de agosto de 1941, hijo de Carlos Díaz Ochoa y María Teresa Torres de Díaz. Fue el cuarto de seis hermanos; Guillermina, Carlos, Sergio, Rogelio, Rubén y Leticia.
Sus estudios, hasta la preparatoria, los realizó en el Colegio de La Salle, pero el espíritu emprendedor lo llevó a iniciar su negocio en la venta y fabricación de aceites para vehículos.
Este trabajo lo llevó a radicar por una temporada en Guadalajara en donde conoció a quien sería su esposa, María Guadalupe López.
Tras dos años de noviazgo se unieron en matrimonio y fueron padres de tres hijos: Rogelio (quien falleciera en 1989), Mabel y Eduardo. Los dos primeros nacieron en la perla tapatía y el más pequeño en León.
Sus hijos le regalaron a quienes serían sus grandes amores, sus nietos Mabel, Miguel Ángel y Estefanía.
Como empresario se adentró además en el mundo del diseño y la publicidad con su negocio Procesos Gráficos para la Publicidad.
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Rogelio fue un hombre de familia, trabajador, siempre al pendiente de sus padres y su familia en general. Muy hermanable y precisamente con sus hermanos formó algunas empresas.
Formó parte del grupo de defensores del Estadio León.
Fue altruista por herencia; de sus padres aprendió el sentido de solidaridad con los que menos tienen apoyando a orfanatorios y congregaciones religiosas.
Su familia lo recordará como “Una persona justa, trabajador y siempre al pendiente de su familia”, según palabras de su sobrino Jorge Díaz.
