El legendario vocalista Chester Bennington perdió la vida el pasado 20 de julio en su hogar en California, Estados Unidos.
Luego de 4 meses de su fallecimiento se revelan detalles de la autopsia que explican el estado en que se encontró el cuerpo del intérprete luego de su deceso.
Según este dictamen, se encontró en su cuerpo una cantidad mínima de alcohol y no se detectó ningún rastro de MDMA (éxtasis), como se había presumido en el informe inicial, en el cual marcaba “presuntamente positivo”, pero los análisis detallados revelaron que no se consumieron sustancias psicoactivas por parte de Chester.
Además, el informe expresa que en la escena del crimen se encontró un contorno negro alrededor del cuello del cantante y no hubo nota de suicidio como se especulaba.
Con información de Publímetro