León, Guanajuato.- Revolucionar el liderazgo empresarial en México y Latinoamérica, es la propuesta del guanajuatense Sergio Nava, empresario que desarrolló un modelo en el que propone liderar empresas como Rockstar.
Nava ha trabajado con BBVA, AstraZeneca, Bayer, Nestlé, PepsiCo, Mercedes Benz, General Motors, Santander, Cemex y Grupo Vidanta.
Psicólogo clínico de profesión, trabajó en el sector privado en empresas Great Place to Work; sin embargo un recorte de personal que ejecutó, lo hizo considerar desarrollarse fuera del mundo corporativo y eso lo llevó a fundar una consultora.
En 2016 empecé a crear el modelo que fusiona lo clínico con el mundo organizacional, que son las dos cosas que yo vivía en ese entonces”.
Para ello, adicionalmente estudió Antropología Filosófica, Bioética, Tanatología, Ciencias de la Felicidad, Ciencias de la pareja, Ciencias de la familia y Psicología positiva, así como estrategia de negocios, en Harvard.
Puntualizó que está creando modelos de liderazgo y de cultura a nivel Latinoamérica, esto fue surgiendo de lo que encontraba en las diferentes industrias.
Detalló que el método incluye cuatro claves -Cuatro H-: hambre, habilidad, humildad y hermandad, que permiten mejorar las habilidades de liderazgo, superar los desafíos para obtener resultados extraordinarios.
Subirse al escenario
Nava refirió que la vida y el trabajo son un escenario, por lo que invitó a ver los negocios de la misma forma:
Con ímpetu porque al tener el reflector estás siendo visto, por lo que debes apoderarte del escenario. Pero no nada más es subirte por subirte, hay que hacer las cosas bien”.
Empezar con definir un hit, que se traduce en el objetivo a seguir por las empresas; debe ser medible y transversal.
Tener hambre de ir por más y mejores escenarios. “¿Con qué sueñas y qué te quita el sueño?”. Esta meta general debe convertirse en un sueño individual de los colaboradores.
Para que la gente quiera reinventarse, aprender, que quiera desafiar sus límites.
El especialista advirtió que no basta con tener ganas y un sueño, “debes tener las habilidades necesarias, estar a la altura del escenario que quieres.
No se vale tener muchas ganas, mucha hambre, pero no tener la competencia que necesitas para estar al frente del equipo o de la empresa.
De nada sirve tener hambre y habilidad, si no tienes la tercera, que es la humildad”.
Esto puede ser aplicado a las empresas y las familias. “La humildad es lo que te ayuda a no dejar de aprender de los demás. En el nuevo escenario de la vida y los negocios los líderes deben estar equilibrados entre sus habilidades y el nivel humano”.
La humildad es pedir ayuda, compartir buenas prácticas, aplaudir al otro, compartir el reflector. “Eso es la humildad, aprender de todos en todo momento en todo lugar”.
Para terminar, la hermandad es la fase más evolucionada; “cuando un líder o un equipo tiene hambre, habilidad y humildad, tienen resultados sostenidos, lo que hemos visto en los negocios.
La fase más evolucionada es cuando ya no se ven por áreas, no se ven por edades, por género, se ve como uno solo, por eso la hermandad es la cuarta H”.
Consideró que este modelo aplica perfectamente para una empresa que quiera pasar a ser triple A. Detalló que la única diferencia entre las empresas top y las que aspiran a serlo, es que dejen de ver el tema de capital humano como un costo y lo vean como
una inversión.
Advirtió que actualmente en la industria se busca agilidad, eficiencia, eficacia, “pero eso solamente la logras al ser un objetivo conjunto, ya no se trata de finanzas o recursos humanos o ventas, sino de la empresa”.
El empresario adelantó que está en conversaciones con tres instituciones educativas, para que este modelo se convierta en una currícula universitaria para formación de líderes, de momento los nombres de las universidades no pueden ser compartidos por
temas de confidencialidad.
SM
