León, ,GTO.- Los negocios de arreglo de uñas decoradas con gel están viviendo un “boom” de emprendimiento, la pandemia redujo su trabajo pero no los detuvo. Tan sólo en León, existen 300 negocios al servicio de aplicaciones y decoraciones de uñas.

Estos servicios se ofrecen por igual en colonias residenciales, populares y la zona Centro. Los costos se definen por la complejidad del diseño, que van de 80 hasta 600 pesos.

Un catálogo de 200 tonos ofrece Miriam Rivera Céspedes, su salón se ubica en Jardines de Moral. La empresaria inició hace 15 años cuando la técnica del aerógrafo estaba en tendencia, en ese entonces ella estudiaba la preparatoria; su intención era ganar dinero extra.

Me dio mucho trabajo, las citas me dan la libertad de tiempo”, destacó. La demanda de los servicios le permitió pagar sus estudios universitarios. A pesar de contar con una licenciatura en comunicación optó por crecer su negocio, “esto era lo mío”, reconoció.

Miriam Rivera Céspedes (al centro) optó por crecer su negocio./Fotos: Silvia Millán

Actualmente cuenta con dos sucursales y nueve personas colaboran junto con ella, la empresaria es quién capacita a sus empleadas.

La contingencia redujo la frecuencia de sus servicios y la carencia de insumos.

En una temporada regular se tenía una cada hora, de momento atiende dos personas por día, sus trabajadoras igualmente están laborando medios días. 

Prefiere diseño

Nora Patricia Gómez empezó estudiando belleza, le llamó más la atención la decoración de uñas.

Siempre me ha gustado traer las uñas arregladas, el diseño es lo que más me gusta, se conoce de todo tipo de gente”,  dijo.

Su negocio está en la Plaza de la Mujer en la zona centro, a pesar de estar rodeada de locales que ofrecen el mismo servicio, su diferenciador es el dibujo a mano alzada, explicó. El establecimiento está al centro del pasillo central de la plaza, su mesa de trabajo está rodeada de al menos otros siete locales que al igual que ella decoran uñas.

Patricia se dedica desde hace cinco años a la decoración en gel y acrílico, este negocio le ha permitido solventar sus gastos. Previo a la pandemia atendía hasta seis clientes por día, actualmente se redujeron a dos. 

Nora Patricia Gómez, su diferenciador es el dibujo a mano alzada.

 

Cambia de profesión

Por invitación de su hermana que tiene una estética, Nora Patricia Gómez, su diferenciador es el dibujo a mano alzada. tomó un curso en decoración de uñas ya que los clientes pedían el servicio. 

Guadalupe Rivera Estrada tomó un curso en decoración.

La estética se ubica en la colonia El Cortijo, la hermana de Lupita fue quien le pagó el curso, que tomó hace 5 años.En ese entonces la emprendedora trabajaba en una clínica como asistente de un médico, una vez que terminó el curso decidió cambiar su trabajo.

Son menos horas y más ganancia”, explicó. Esta profesión tiene la ventaja de que puede administrar sus horarios para cuidar a sus hijos.

Derivado de la contingencia sanitaria, los primeros meses se redujo la frecuencia de sus clientas ante el temor de contagios. Hace tres semanas que se está mejorando, una de sus estrategias fue promoverse en redes para tener mayor afluencia.

 

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