León, Gto.- Un buen sabor de boca y una profunda reflexión dejó entre los leoneses la obra teatral “¿Qué entiendes tú por amor?”, presentada por la compañía Garito de los Emulantes, bajo la dirección de Fernando Rabell, en el Teatro García Téllez, ubicado a un lado de la Clínica T1 del IMSS en la colonia El Paraíso. La asistencia fue buena y los comentarios del público, mejores.
La obra ofreció tres funciones (17, 18 y 19 de octubre), al final de las cuales el elenco, el director y el productor recibieron nutridos aplausos. La última función, el domingo a las seis de la tarde, concluyó una hora después y la escenificación fue reconocida con efusivas muestras de cariño del público.
Esta pieza escénica, proveniente de Querétaro y autoría de Bertha Hiriart, fue incluida en el programa Escenario IMSS 2025, una selección de obras del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) y el IMSS Guanajuato.

El elenco se integró por Atalia Suriday en el papel de Teresa, Rafael Ramos como Julián (el novio de Teresa), María Reza (Fantasma 1), Mirza Pérez (Fantasma 2) y Fernando Negrete (Fantasma 3).
El mensaje central de esta tragedia aleccionadora se centra en dos puntos vitales: poner freno al acoso escolar y decir alto a la violencia contra las mujeres.
La obra se mueve en dos planos: el primero, terrenal, que aborda la compleja relación de Teresa con su enamorado; y el segundo, un plano imaginario donde habitan los fantasmas, quienes buscan justicia y vigilan lo que sucede en la Tierra, pues ellos murieron a consecuencia del acoso escolar y la violencia. El mensaje directo y contundente es claro: ¡Basta ya!
El acoso escolar
La obra plantea el tema del acoso escolar al abordar diversos casos: Jairo Vázquez, un joven víctima de bullying y agresión física por parte de sus compañeros debido a su orientación sexual, quien, tras amenazas de muerte, confiesa pensar en el suicidio.
El caso de María de Jesús, una chica de 16 años en Filadelfia que fue golpeada en el baño por cuatro compañeros, un hecho que se viralizó tras ser subido a las redes sociales.

El menor de edad otomí de Querétaro que fue quemado por dos amigos. Tras siete semanas hospitalizado y ser sometido a seis cirugías de piel, por fin regresó a su vivienda. Sus agresores, de 13 años, fueron vinculados a proceso por lesiones dolosas.
El asesinato de Lizbec, quien fue ultimada con una piedra por una compañera. Sus familiares cumplieron el sueño de su fiesta de XV años, pero en la tumba, y claman justicia.
La historia de Teresa y Julián
El relato inicia con la presencia de los fantasmas (María Reza, Mirza Pérez y Fernando Negrete), vigilantes de los vivos, quienes son testigos del nacimiento de Teresa en un taxi. Dialogan sobre lo que deseaban ser y la actitud de sus padres respecto a su género, teniendo en común que todos murieron a causa de la violencia y el acoso.
En un momento, aparece Julián, personificado por Rafael Ramos, buscando a su novia: “¡Teresa… Teresa!”. Su angustia cesa cuando ella aparece. Hablan de un viaje a la playa. Teresa se muestra ilusionada y melosa, incluso le pregunta cuánto la quiere, y él responde “hasta lo indecible”. El personaje de Julián, un “hijo de papi”, encadena a Teresa con sus promesas de amor.
Posteriormente, se presenta una escena en una preparatoria, donde los alumnos son sometidos al operativo “Mochilazo”. A Julián le decomisan una navaja, un arma que él presume a Teresa prometiéndole que con ella “la defenderá de los tiburones”.

Los fantasmas son testigos de la relación de amores y desamores de la pareja. Discuten sobre la violencia en cualquiera de sus formas y la necesidad de detenerla. Finalmente, abandonan su sitio, y el Fantasma 3 (Fernando Negrete) menciona: “No creo que pase nada”.
Es precisamente esa noche —aunque para ellos los fantasmas son atemporales— que, sin nadie de guardia, Julián asesina a su novia Teresa. En un arranque de coraje desbordado porque ella no quiso quedarse más tiempo en la fiesta, él la apuñala con la navaja que ella le había regalado.
Teresa habla con los fantasmas
Los fantasmas regresan a su guarida, encuentran a Teresa sin vida y le dan sepultura. Después, ella se les une y la confrontan con todos sus errores: tolerar la violencia de Julián, el sometimiento, y dejar de hacer lo que le gustaba para que su pareja no se enojara.
Uno de los fantasmas define las causas de la violencia contra las mujeres: 1. Cuando una persona quiere controlar a otra; 2. Cuando la otra lo permite; 3. El miedo y la inseguridad en la relación de pareja.
Al unísono, los fantasmas (dos hombres y una mujer) convencen a Teresa de darse a respetar y juzgar con severidad a Julián, quien, quitado de la pena, viaja por Brasil, amparado por su “padre, un hombre influyente”.
Finalmente, los cuatro actores en escena pactan un compromiso, al estilo de los Tres Mosqueteros, para defender el mensaje principal de la obra de teatro “¿Qué entiendes tú por amor?”: ¡Alto a la violencia contra la mujer!

DMG
