Apaseo el Alto, Guanajuato.- Once elementos de la Guardia Nacional (GN) fueron detenidos la madrugada del domingo tras ser sorprendidos presuntamente extrayendo combustible de una toma clandestina en la comunidad de El Espejo. Los agentes, que inicialmente afirmaron brindar “resguardo” a una pipa, fueron descubiertos por la Policía Municipal.
Los hechos ocurrieron alrededor de la medianoche del sábado 24 de mayo, luego de que una denuncia al 911 alertara sobre una posible toma clandestina. Al llegar al sitio, elementos de la Policía Municipal de Apaseo el Alto se encontraron con varias unidades de la Guardia Nacional.
Aunque los efectivos federales manifestaron estar custodiando una pipa, una inspección de la zona reveló que en realidad estaban conectados a una toma ilegal, extrayendo hidrocarburo. Al ser descubiertos, algunas de las camionetas de la Guardia Nacional emprendieron la huida.
A pesar de la fuga de algunos vehículos, once elementos de la Guardia Nacional fueron detenidos. Los uniformados aprehendidos fueron identificados como Daniel “N”, Erick “N” (quien conducía la pipa), Josué “N”, Miguel “N”, Fernando “N”, Julio César “N”, Juan “N”, Brayan “N”, Iván “N”, Carlos “N” y Cristian “N”.
Junto con los detenidos, se aseguraron dos camionetas Pick Up Silverado (patrullas de la Guardia Nacional), una camioneta particular Nissan Rogue modelo 2010 y un tractocamión con autotanque que estaba directamente conectado a la toma clandestina. Las armas de cargo de los agentes, fusiles calibre 5.56 x 45 milímetros, también fueron puestas a disposición de las autoridades.
Los once agentes y el equipo incautado fueron entregados a la Fiscalía General de la República (FGR), que ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos y determinar la situación legal de los involucrados. Hasta el momento, la Guardia Nacional no ha emitido una postura oficial sobre el incidente.
Unas horas después, a 8 minutos del lugar, un hombre fue asesinado a balazos dentro de su domicilio.

Otro caso
Este incidente no es un caso aislado en Apaseo el Alto. Desde 2019, la participación de elementos de la Guardia Nacional en actividades relacionadas con el robo de combustible, conocido como “huachicoleo”, ha sido motivo de preocupación en la región.
Información obtenida de documentos sustraídos a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por el grupo de hacktivistas Guacamaya Leaks, revela alianzas entre grupos delictivos dedicados al robo de combustible y la posible complicidad de autoridades.
Según un documento de mayo de 2020, José Trinidad Zarco, alias “El Padrino”, líder de una banda dedicada al robo de gas LP en el Estado de México, forjó una alianza con José Antonio Yépez, alias “El Marro”, entonces líder del Cártel Santa Rosa de Lima.
El objetivo de esta alianza, fraguada en enero de 2019, era expandir el robo de gas LP en Guanajuato, particularmente después de que el Plan Conjunto del Gobierno de México para Combatir el Robo de Hidrocarburos afectara las operaciones del Cártel Santa Rosa de Lima.
Las investigaciones federales, que incluyen interceptaciones telefónicas de la Sedena, detallan cómo “El Padrino” y sus colaboradores tejieron una red para el trasiego de combustible robado desde Guanajuato hasta el Estado de México.
Uno de los aspectos más alarmantes de esta red, según los documentos de Guacamaya Leaks, es la presunta complicidad de elementos de la Guardia Nacional.
En abril de 2020, un colaborador de “El Padrino” confirmó haber “arreglado” con la Guardia Nacional para operar en San Antonio Calichar. Ese mismo día, “El Padrino” afirmó haber conversado personalmente con un “chido” de la Guardia Nacional para facilitar sus operaciones en Celaya.
Para el 1 de mayo de 2020, José Trinidad Zarco reveló en otra conversación telefónica que los elementos de la Guardia Nacional con los que se había “arreglado” exigían 120 mil pesos por noche para permitirles operar.
Estas revelaciones sugieren una estructura de corrupción arraigada que permitió el flujo de gas LP robado desde Guanajuato hasta el Estado de México. “El Padrino” fue detenido el 27 de septiembre de 2020, poco después de la captura de “El Marro” en agosto de 2020.
La detención de los once elementos de la Guardia Nacional en Apaseo el Alto reaviva las preocupaciones sobre la infiltración del crimen organizado en las fuerzas de seguridad y subraya la necesidad de una investigación exhaustiva para erradicar estas redes de corrupción.
DAR/AAK

