Jesús insiste, sin éxito, en abrir a sus oyentes a una comprensión trascendente de la vida y la muerte. Ellos solo entienden que si hasta los hombres más cercanos a Dios ––Abraham y los profetas–– han muerto, con mayor razón ellos y Jesús.
Etiqueta:DANTE GABRIEL JIMÉNEZ MUÑOZ LEDO
Publicado enopinion
Creer es testimoniar la vida y el amor
Publicado enopinion
Comuniquemos vida
Publicado enopinion
Que nada nos paralice
Publicado enopinion
Acerquémonos al reino
Publicado enopinion
Ideologías y demonio
Publicado enopinion
Las promesas de la ley
Publicado enopinion
Amor que viene del perdón
Publicado enopinion
Entremos en el templo nuevo
Publicado enopinion
