Durante el pasado sexenio, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez quiso que el ISSEG se asociara con particulares para crear una “arrendadora”. La idea nunca tuvo fondo o razón de ser, al menos como la plantearon y operaron. Nació Arrendadora GTO Leasing Service”, primero con capital mayoritario del ISSEG, Instituto de Seguridad Social del Estado de Guanajuato. Luego pasó a ser un negocio con mayoría de dos familias de empresarios.
Desde que Diego la planteó, el negocio no tenía pies ni cabeza para el gobierno de Guanajuato, que se convirtió en su gran y casi único cliente. Pongamos referencias de lo que es y para qué sirve una arrendadora.
El arrendamiento es un negocio basicamente financiero. Su servicio a las empresas es otorgar capital de trabajo en forma de equipo, maquinaria y hasta inmuebles. Ayuda mucho a las compañías que crecen y necesitan vehículos. Una flotilla de reparto es un buen ejemplo. Proveer medios de transporte para funcionarios de empresas y gobiernos es también un servicio útil cuando hay restricciones presupuestarias para hacer compras.
A las empresas les ayuda pagar rentas en lugar de usar su capital de trabajo, eso mejora su flujo a corto plazo y disminuye la carga fiscal. La contraparte es el costo del dinero. La tasa de interés puede duplicarse y hasta triplicarse en comparación a la de un banco. Hay además comisiones y seguros que encarecen todo. Muchas arrendadoras comienzan a cobrar la renta por anticipado.
El tema es que el gobierno de Guanajuato no necesita crédito para arrendar, primero porque le sale mucho más caro que sacar un cheque de la Secretaría de Finanzas y pagar sus compras (el gobierno promedió más de 30 mil millones de pesos en bancos el último año). Además tiene que pagar IVA sobre las rentas, un 16% de sobreprecio automático. Si Diego quería ayudar al ISSEG a crear una nueva empresa con altas miras para que la institución obtuviera mejores rendimientos que en otras inversiones, pudo ser una buena idea. Pero, ¿para qué invitar a socios amigos del gobernador cuando lo menos que necesita el ISSEG es dinero?
En los últimos años las farmacias del ISSEG probaron ser una magnífica inversión que rinde buenas utilidades a las pensiones de los trabajadores del gobierno. También tiene inmuebles y estacionamientos. No conocemos la tasa de retorno de esos negocios pero supongamos que van bien. Como ejemplo, ¿para qué querría el ISSEG convidar a socios privados en sus farmacias?
Algo nos olió mal.
Un plan de negocios para el ISSEG comprendería promover el arrendamiento financiero para competir con otras arrendadoras. Salir al mercado como muy bien lo hacen con sus farmacias. Lo curioso es que “Guanajuato Leasing” sólo pudo colocar inversión con el Gobierno de Guanajuato. Un negocio forzado que las dependencias lamentaron porque se les cargaba el bulto completo del negocio propuesto por Diego.
Cuando finalmente tuvimos parte de la información de la empresa “público-privada”, como solía promoverse desde el gobierno, notamos que ha sido un negocio ventajoso para el ISSEG y los inversionistas privados, pero muy desventajoso para Guanajuato. La sospecha fue inmediata cuando ocultaron todo. Durante años escondieron a los socios, negaron información financiera y operaron desde una oficina -que más bien parece un tendajón- en un centro comercial del ISSEG en la capital.
Jamás vimos que anunciaran sus servicios a las empresas o al público en general. El diseño del negocio era venderle dinero caro al gobierno. No tuvo ningún otro fin. (Continuará).
