El pasado miércoles 15 de mayo la Fiscalía General de la Nación en una operación sorprendente por el número de elementos que desplegó de manera muy bien coordinada, cateó simultáneamente 11 domicilios en esta ciudad de León, Guanajuato, desde las 4:30 de la madrugada hasta las 11:00 a.m. aproximadamente.
Fue un gran triunfo y logro de las fuerzas federales como no se había visto en muchos años, no solamente aquí sino en ninguna otra parte del país.
El saldo final: 11 inmuebles cateados y asegurados; 27 vehículos de súper lujo entre ellos un Lamborghini, Ferraris y dos McLaren, camionetas Hummer, dos Mercedes Benz último modelo, dos camionetas Escalade de lujo; dinero en efectivo en 10 cajas fuertes y en los closets de algunas residencias en pesos, dólares, yenes y billetes colombianos y cubanos.
Además 12 detenidos, armamento diverso y variadas drogas tales como metanfetaminas, cocaína y marihuana.
Los bandidos
Según la información difundida profusamente por este periódico (AM León.- 24/25/26/27/28 de mayo de 2019 secciones A y B) entre los detenidos sobresalieron los nombres y apellidos de varios miembros de una familia, iniciando por el cabecilla o líder apodado el “H1” de nombre Héctor Ortiz Solares, Cinthya Estrella Ortiz Solares, Juan Carlos Ortiz Solares.
Entre otros, así como también Raúl Alejandro Lemus Maldonado, Miguel Ángel Campos Espinoza, Sara Esperanza Arévalo Chávez, esposa del líder; Fabio Xochiotzi Peña y Francisco Gálvez Espinoza, a quienes específicamente en su domicilio ubicado en la calle Hacienda del Palote 418 se les incautaron ocho motocicletas y tres cuatrimotos, dos vehículos Racer, cinco laptops, tres computadoras, celulares con una bolsa de chips y decenas de tarjetas bancarias, así como también otros dos vehículos de lujo Mercedes Benz y Peugeot.
Las viviendas aseguradas desde donde operaban o residían los miembros de la banda se localizaron en las calles Monte Blanco 126 y Monte Everest 131 en Cumbres del Campestre, Cañada del Llano 119 en Cañada del Refugio, Hacienda del Palote 418 en Balcones del Campestre, Jardín de los Cisnes 256, Abedules 114 y Jardín de los Cormoranes 112 en Gran Jardín, Monte Bernese 106 en Lomas del Refugio, en Jardines del Campestre, Muralista Latino 230 en Real Murales, Cañada Zambeze 125 en Cañada Diamante; esto es en zonas de un alto nivel económico.
La organización se hacía llamar también a través de las redes sociales como “Bandidos Revolutions Team”, por lo que el líder Ortiz Solares era también conocido como “Bandido Boss”.
Modus operandi
En solamente dos meses lograron intervenir el sistema de pagos electrónicos interbancarios obteniendo 300 millones de pesos a las instituciones Banorte, Inbursa y Kuspit.
Para ello se contrataba a profesionistas y los miembros eran expertos en ingeniería informática; tenían como toda banda organizada una división de tareas diversas desde antes de cometer los atracos como hasta custodiar y resguardar el dinero; todo el grupo de los mencionados son jóvenes pues el mayor apenas alcanza los 36 años.
De todos los detenidos quedaron ocho integrantes procesados por lavado de dinero, delitos contra la salud, posesión de armas de fuego y de cartuchos de uso exclusivo del Ejército.
Se encuentran procesados en el penal de Santiaguito en Almoloya de Juárez, Estado de México, pero aún les restan por fincarles responsabilidades probablemente en otras nueve carpetas de investigación que se encuentran en la Fiscalía.
Aunque en la primera audiencia de vinculación el Juez Federal de Justicia Penal, Iván Aarón Zeferín, reservó el delito de delincuencia organizada por algunos detalles y fallas en la judicialización, dejó las puertas abiertas, o sea con las reservas de ley a la Fiscalía para que purguen dichas anomalías y puedan volver a judicializar los hechos también por este delito.
A la fecha se han asegurado y congelado 13 cuentas bancarias de personas relacionados con estos hackers, así como también se han detectado diversas empresas en Tamaulipas, Veracruz y otras localidades; se sigue investigando.
Trascendió que el llamado “H1” tenía un portagafete a su nombre de Comandante de Seguridad Pública, aunque no se precisó de qué entidad gubernamental.
Esta organización ya operaba desde hace cinco años, y según el periodista Héctor De Mauleón lograron obtener más de mil millones de pesos, pero seguramente Ortiz Solares no logró saciar su ambición y continuó operando hasta que finalmente sucumbió ante las investigaciones, deserciones del grupo y fallas en su operatividad.
Su infiltración social
Desafortunadamente para nuestra localidad, ya son varios pájaros de cuenta y delincuentes famosos que han transitado o residido temporalmente y algunos hasta permanentemente como éstos, aquí en la ciudad de León.
No sé si se brinda un gran atractivo en el entorno social de nuestra localidad, así como en las instituciones educativas, de salud, de esparcimiento y el punto geográfico, pero me atrevo a asegurar que el factor primordial ha sido la aceptación de la sociedad leonesa hacia este tipo de delincuentes. ¿Acaso sin saberlo?
Desafortunadamente, aquella apreciación que se tenía de que nuestra comunidad, todavía hacia los años 70, era muy cerrada, desconfiada de los fuereños y solamente se aceptaba a las familias muy conocidas o recomendadas por otras en los distintos estratos sociales.
Que éramos una comunidad que se fijaba en los valores de las personas que apreciaba más la sinceridad, la solidaridad, la bondad y la nobleza que el dinero, la riqueza y la vida ostentosa de lujos y despilfarros ha quedado atrás.
No obstante, es desde fines del siglo pasado hacia estos días, hay noticias de que aquí han estado radicando parientes de Caro Quintero, del Chapo Guzmán de la presencia de la “Reina del Pacífico” y algunos otros que han sido aquí capturados.
Podríamos afirmar que el otro factor que adicionaría, precisamente sería que nuestra sociedad ha bajado la guardia, se ha relajado, tornándose en complaciente, poco cuidadosa, irreflexiva, superficial y seducida por quien ostenta autos costosos, relojes de oro, joyas caras y muestra gran poder económico.
Esto sin importar de dónde proceda, qué educación tenga, sin cultura, ni que hábitos o costumbres realice y son aceptados en nuestro entorno simplemente por esas características, ingresando a las escuelas más prestigiadas, sus hijos, su parentela y amigos, a clubes de servicio y consentidos en los restaurantes, bares y demás centros de servicios.
Se infiltran en nuestras casas, entre nuestras familias, sus hijos y nuestros hijos inician lazos de amistad que luego resultan inexplicables e incómodos.
Y el “modus operandi” de las esposas, parejas o acompañantes de estos malandros siguen como un protocolo bien definido para lograr estimación y confianza en nuestros ámbitos sociales, con actitudes generosas, ofreciéndose para cooperar en fiestas o festejos religiosos o escolares, aportan de inmediato hasta de más para obras escolares, apoyan a otros padres de familia en las escuelas en donde han logrado infiltrar a sus hijos, derrochan amabilidad y ayudan hasta económicamente a quien se los solicita o cuando se enteran que alguien tiene una necesidad económica, espontáneamente le brindan favores.
En fin, toda esta estrategia nos ha quedado muy clara específicamente con la captura de esta organización, pues subsistir y relacionarse en nuestra sociedad leonesa durante cinco años sin que nadie sospechara o desconfiara de ellos, ocho familias de delincuentes, avecindados e integrados, quienes poco a poco lograron asentarse primero en fraccionamientos periféricos o suburbanos, tales como Lomas de Comanjilla, El Álamo, El Mayorazgo Residencial, Club de Golf La Hacienda entre otros, ganando la confianza y obteniendo recomendaciones de los arrendatarios, para posteriormente acercarse en plena zona urbana, rentando nuevos domicilios dentro de los fraccionamientos también de lujo donde finalmente serían localizados, contando ya con las referencias de anteriores arrendadores y venciendo la desconfianza de los nuevo propietarios favorecidos, quienes ahora soportarán probablemente procesos de Extinción de Dominio y el riesgo para sus inmuebles.
Queridos Leoneses ¡Resistámonos a que El Dinero Todo lo Vence!
