Casi 57 mil millones de dólares es lo generado por el narcotráfico en 2016. El Gobierno incautó solamente el 0.1% de esta cantidad.
El reporte del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) de ese año reportó que la administración no ha sido capaz de golpear los bolsillos de los grupos criminales, y también reveló los altos índices de impunidad de la Procuraduría General de la República al investigar casos de lavado de dinero.
La evaluación presentada por el GAFI, así como otra de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) expone que el gobierno se ha visto rebasado por cómo los grupos delictivos, así como políticos corruptos, evasores fiscales y otros criminales lograr insertar su dinero al circuito financiero legal.
Y remata con señalamientos a las instituciones que han fallado en su trabajo. A la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) por no vigilar a los operadores de este delito y a la PGR por no investigar, y castigar, en su caso, a los criminales.
La cereza del pastel fue puesta por Juan Miguel Alcántara Soria, exprocurador de Justicia de Guanajuato, quien reveló cómo miembros de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), dependiente de la SHCP, cabildearon con los inegrantes del GAFI para que “suavizaran” el reporte que presentaron.
