En 2005, Mossack Fonseca entró en contacto con el despacho Mijares, Angoitia, Cortes y Fuentes, del que fue fundador el actual vicepresidente de Finanzas de Televisa, Alfonso de Angoitia.
La empresa le ofreció a Mossack Fonseca integrar a su cartera a importantes empresarios de México, como Emilio Azcárraga Jean, presidente de Televisa. Uno de los productos de Mossack Fonseca que más le interesó al despacho del ahora ejecutivo de la televisora fue la creación de fundaciones.
Angoitia admitió haber adquirido esta empresa en Bahamas “con el propósito de comprar un departamento y una membresía en un club de buceo náutico ubicado precisamente en Bahamas, deporte que practica desde hace muchos años”.
Pero aseguró que se trató de una “adquisición pública y transparente”, por lo que le negó relevancia al tema, según respondió el ejecutivo de Televisa a Aristegui Noticias a través del vocero de la empresa, Alejandro Olmos.
Por otra parte, el presidente de TV Azteca, Banco Azteca y Fundación Azteca Ricardo Benjamín Salinas Pliego también usó una compañía offshore creada en Islas Vírgenes con la firma panameña para la compra de un yate.
Entre los prominentes hombres de negocios que han entrado al secreto mundo de la movilización de capitales está Guillermo Cañedo White, ex ejecutivo de Televisa y vicepresidente de la Confederación Norte, Centroamérica y del Caribe de Futbol (Concacaf), entre 2007 y 2012. Ese periodo está bajo investigación de la justicia de Estados Unidos como parte de la corrupción de la Federación Internacional de Futbol (FIFA).
Otro de los mexicanos con una amplia relación con Mossack Fonseca, es Ángel Remigio González González, uno de los socios de Cañedo White.
Dueño de medios de comunicación en Centro y Sudamérica, el empresario conocido como El Fantasma, por su reiterada negativa a aparecer en público, es socio de Cañedo White en una firma offshore creada en las Islas Vírgenes Británicas. Ninguno se reportó a los llamados del semanario.
El espectáculo vinculado a la política mexicana tampoco ha sido ajeno a Mossack Fonseca.
La actriz Edith González Fuentes aparece como beneficiaria final de una empresa radicada en Bahamas. González está casada con Lorenzo Lazo Margain, director jurídico del despacho Alemán Velasco y Asociados. Este bufete pertenece a Miguel Alemán Velasco, hijo del ex presidente de la República, Miguel Alemán Valdes.
Alemán Velasco ha sido socio de Televisa y gobernador de Veracruz, y es dueño, entre otras empresas, de la aerolínea Interjet. Lazo Margain no respondió a las llamadas de Proceso.
González fue además pareja del ex secretario de Gobernación Santiago Creel. Durante gran parte de su carrera ha sido actriz de Televisa, aunque desde 2010 trabaja para TV Azteca.
Abre Mossack puerta a políticos
Entre los familiares de políticos a los que Mossack les abrió la puerta sin mayor cuestionamiento, se encuentra el empresario Omar Yunes Márquez, hijo del diputado federal del PAN y candidato de ese partido al gobierno de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares.
El empresario avanzó en la creación de un fideicomiso en Nueva Zelanda, en el que estarían como beneficiarios él y su esposa. La operación no llegó a llevarse a cabo porque el hijo de Yunes desistió, pero el departamento de debida diligencia de Mossack Fonseca nunca alertó que la ley en México considera como PEP expuesto a familiares hasta cuarto grado y Yunes Márquez es hijo de un político y hermano de otros dos, el actual senador del PAN Fernando Yunes Márquez y el ex alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunez Márquez.
Carlos Sousa, director de Relaciones Públicas de Mossak Fonseca, asegura que sus clientes llegan a través de despachos de abogados e instituciones financieras, incluidas sucursales de grandes bancos.
Otro de los políticos mencionados como beneficiario de una de las empresas offshore es el ex diputado local de Chiapas y ex presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Tuxtla Gutiérrez, Noé Fernando Castañón Ramírez, hijo del ex ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y ex secretario general de Gobierno de Chiapas, Noé Castañón León.
Rechazan a Hank Rhon
Según la documentación interna de Mossack Fonseca, sólo hay un caso mexicano en el que dijo que no: el de Carlos Hank Rhon, accionista mayoritario del Grupo Financiero Interacciones.
En febrero de 2015, en otra investigación internacional conocida como Swiss Leaks, el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación dio a conocer que Hank Rhon tenía depositados 150 millones de dólares en Suiza en operaciones que tenían el propósito de evadir impuestos o esconder el dinero.
La negativa de Mossack Fonseca a Hank se debió al tamaño del desprestigio de su familia luego del escándalo internacional en el que estuvo involucrada cuando el gobierno de EU emprendió a mediados de los años 90 la llamada Operación Tigre Blanco.
Sin embargo, Interacciones Casa de Bolsa, propiedad de Hank Rhon, aparece en los archivos de Mossak Fonseca como un “prospecto de cliente” en 1996, cuando estaba en marcha la investigación estadounidense contra la familia de Carlos Hank González, fundador del grupo político Atlacomulco, Estado de México, del que surgió el presidente Peña Nieto.
Oceanografía y Pemex
Otros de los relacionados con Pemex que figuran en el entramado internacional de ocultamiento de dinero son los socios de Oceanografía, empresa favorecida en el gobierno de Felipe Calderón con millonarios contratos con Pemex.
Amado Yáñez Osuna, Martín Díaz Álvarez y los hermanos Oscar y Francisco Javier Rodríguez Borgio le compraron a Mossak Fonseca tres empresas offshore en las Islas Vírgenes Británicas, al este de Puerto Rico.
Por otra parte, Emilio Lozoya Austin, primer director de Pemex bajo Peña Nieto, buscó también establecer relación con Mossack Fonseca.
Antes de integrarse al equipo de Peña, Lozoya fue miembro del Consejo de Administración del Grupo OHL, en México, otra firma de infraestructura cercana al Presidente. En marzo de 2011, Lozoya pretendió crear una sociedad con la firma panameña a través de Dubái.
(Con información de Apro)
