Un grupo de estudiantes y su maestro de la secundaria técnica número 14, dejaron su aula para tapar con tepetate los hoyos y charcos que con las lluvias de cada año se forman.
La escuela secundaria técnica número 14 se ubica a un lado de la carretera Salamanca-Irapuato, forma parte de la colonia Rancho Grande y en el lugar estudian 820 alumnos en el turno matutino y vespertino.
Las labores escolares continuaban la rutina para la mayoría de los estudiantes pero a las 9 de la mañana, un pequeño grupo integrado por 3 mujeres, 3 jóvenes y un maestro, utilizaron unas palas así como una carretilla para esparcir el tepetate sobre los charcos y el lodo.
El maestro que dijo impartir la clase de agricultura comentó que: “Todos los años nos pasa lo mismo, los coches de los maestros no pueden entrar al estacionamiento y los jóvenes se ensucian su calzado, con esto, al menos no se harán charcos”.
Los estudiantes, llenaban a la carretilla con tepetate y el maestro, a veces auxiliado por otro joven estudiante, trasladaban al material hasta el charco y lo vaciaban, mientras que otro estudiante, se encargaba de esparcir bien a la tierra.
“Unos compañeros, se avientan a lo charcos o avientan a los compañeros, para entrar a la escuela, tenemos que caminar a un lado de la carretera y llegar al camino que esté seco para llegar a la puerta de la escuela”, dijo uno de los estudiantes.
El estacionamiento de la escuela, sirve para que un promedio de 40 maestros y personal de oficinas, dejen seguros sus vehículos y en el turno vespertino hay más actividad de profesores.
El profesor encargado de la obra, indicó que “Creo que el material fue donado por la Presidencia Municipal, no sé si alguna vez se haya gestionado que se ponga asfalto o concreto a la calle, algunos jóvenes aprovechan los charcos para jugar y mojarse, también por eso estamos haciendo esto”.
Los estudiantes y su maestro, adquirieron un refresco sin gas, para refrescarse por el esfuerzo que hacían pues la tarea fue esparcir los montículos de material que fueron dejados frente al plantel.
En el extremo izquierdo de la escuela, el paso de autos es casi imposible y los estudiantes también tienen que rodear los charcos y el lodo para caminar con cierta seguridad hacia su escuela, pues muchos de ellos, según los estudiantes, deben caminar a un lado de la carretera.