Con la esperanza de encontrar una vida mejor, para poder mantener a sus familias y lograr sus sueños, Juan Hernández y César Antonio Martínez, dos migrantes guatemaltecos, viajan en tren para llegar a su destino, Estados Unidos.
Los dos migrantes emprendieron el viaje desde hace 20 días, para alcanzar el sueño americano, soportando lluvias, calor y sufrimiento, ya que han sentido el desprecio de las autoridades mexicanas, que ya los encarcelaron una vez.
La situación difícil de su País los obligó a salir para buscar el sustento de sus familias, a las que esperan darles noticias en cuanto lleguen a Sonora, su destino más próximo, para después intentar cruzar el río Bravo y llegar al País vecino, donde quieren comenzar una nueva vida.
“La verdad, como no conseguimos trabajo y no somos de aquí, no traemos papeles y mucha gente nos dice que somos de aquí y estamos desempleados, por esa razón vamos a seguir adelante”, dijo Juan Hernández.
Al no contar con más propiedades que la ropa que visten, Juan y César Antonio han tenido que pedir dinero en las calles, para abastecerse de agua y alimentos, mientras esperan a que el tren en el que se transportan vuelva a emprender su camino.
César Antonio Martínez ha sufrido en este viaje, pues en una ocasión cuando el tren paró, fue asaltado por un grupo de maleantes, quienes lo despojaron de sus zapatos y todas sus pertenencias, y lo dejaron a la intemperie con la certidumbre de donde podría conseguir ayuda.
“Venimos sufriendo y venimos gozando, aguas, hambre, calor, nosotros pedimos una moneda nada más para seguir, hay gente a la que no le gusta y policías que no nos dejan pedir aunque tengamos hambre”, dijo César Antonio.
Los migrantes relataron que aprovechan cada oportunidad que se les presenta, pues el tren no siempre para en la ciudad.