En farmacias particulares existen medicamentos para pacientes diabéticos y hay disposición de vender las medicinas que los pacientes del sector salud necesiten.
Los derechohabientes del ISSEG pueden comprar su medicamento en caso de no existir en las farmacias de esa institución y recibirán un comprobante con el cual podrían recuperar el dinero gastado en surtir sus recetas.
En 2 farmacias del ISSEG ubicadas en el Centro Histórico, las encargadas no quisieron decir si hay o no desabasto de medicamento.
En la farmacia San Francisco de Asís, ubicada en la calle Manuel Doblado y Obregón, existen suficientes medicamentos de patente que pueden ser surtidos por los derechohabientes y que a pesar de ser vendidas, también el paciente puede solicitar su reembolso económico a la institución a la que pertenece.
Para pacientes diabéticos, el costo más caro de medicamento es de 150 pesos y el más barato de 10 pesos.
“El derechohabiente del ISSEG puede surtir su medicina y aquí le damos su comprobante para que recupere el dinero”, dijo.