Las cuotas que pagan empresas y trabajadores al IMSS, subirán.
Con 336 votos a favor, 115 en contra y 13 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó ayer las reformas legales que homologan el denominado “salario base de cotización” -con el que se calculan las cuotas obrero-patronales que se reportan al IMSS-, con la base gravable que se usa para el pago del ISR.
“Con esta reforma se pretende corregir distorsiones del sistema legal vigente, que han permitido a algunos patrones subestimar los salarios de sus trabajadores para pagar menos cuotas al Seguro Social. Y por la otra parte, sobreestimar los mismos salarios al SAT para poder obtener una mayor deducción del Impuesto Sobre la Renta”, resumió el priísta Jorge Herrera al fundamentar el dictamen.
La reforma establece que prestaciones como los fondos de ahorro, las cuotas para las subcuentas de retiro, las aportaciones a la subcuenta de vivienda, las despensas en especie o en vales, entre otras prestaciones formarán parte del salario base de cotización cuando sobrepasen el monto de exención que para cada uno de ellos establece la Ley del ISR.
En la exposición de motivos se asegura que la medida beneficiará a los trabajadores porque seguirán pagando 2.6 pesos de cuota obrera por cada 100 pesos que ganen y por cada peso que paguen obtendrán 6.7 pesos en sus cuentas de ahorro para el retiro y vivienda.
El PAN votó en contra de la reforma al argumentar que la convocatoria para aprobar el dictamen fue ilegal, porque no se tomó en cuenta al titular de la comisión, el panista José Isabel Trejo, y porque consideró que la misma debía discutirse con la reforma hacendaria integral.
El Consejo Coordinador Empresarial reprobó las reformas, con el argumento de que la modificación representa un aumento sensible en las cuotas que pagan las empresas y los trabajadores.