En el estado de Massachusetts, en Estados Unidos, el lunes fue un día festivo y no hubo clases. El New England Conservatory sí convocó a sus estudiantes, lo que salvó al leonés Luis Mario Ruela Romo de estar en el lugar de las explosiones en Boston.
“Fui al maratón, estuve como a 200 metros de la línea final, pero tenía clases y me tuve que ir… de no haber tenido clases me quedo a ver a los maratonistas”, dijo.
El estudiante dijo que en Boston la gente guarda silencio, el transporte sufre retrasos y están cerradas 15 cuadras cercanas a la calle Boyslon.
El leonés estudia una licenciatura en composición musical, el lunes en un rato libre dejó la escuela para ver el maratón, como alguna vez lo hizo con su papá, Luis Mario Ruela, quien participa en éstos.
Menos de media hora antes de las explosiones tuvo que regresar a clases.
“Cuando sucedió nos llegaban mensajes de familiares, pero nadie tenía señal, después de una hora ya empezamos a tener contacto”, contó.
Los estudiantes permanecieron en el conservatorio, hasta que todo se calmó y pudieron trasladarse a sus casas.
“Permaneció cerrado el transporte, yo como hasta las 7 de la noche pude moverme al metro, de hecho atletas se quedaron en hoteles a la redonda y no los han dejado salir”, dijo.
Su compañera de cuarto Aby Sánchez, también leonesa, estudiante de Historia del Arte en la Universidad Mass Art, no fue al maratón, pero no pudo salir del departamento de una amiga hasta la mañana siguiente.
Aby radica desde hace cinco años en Boston, que describió como tranquila y en donde ahora la gente se muestra triste por los bombazos que dejaron dos fallecidos y decenas de heridos.
Los estudiantes leoneses se vieron hasta la mañana siguiente, acudieron a clases normalmente, aunque Luis Mario aseguró que Boston no será el mismo.
