La comunidad artística guanajuatense se encuentra de luto, ha muerto un gran pintor irapuatense, creador de innumerables obras que trascendieron fronteras; su nombre Antonio González Juárez, mejor conocido como “El Charro” González.
El 18 de marzo, a las 6:45 de la tarde, a causa de un enfisema pulmonar, el pintor irapuatense dejó esta tierra que le brindó incontables satisfacciones, entre ellas: amor por el arte, reconocimientos a nivel internacional, pero principalmente la oportunidad de ver a sus nueve hijos crecer.
“El Charro” González descubrió su talento por el pincel a temprana edad, pero fue al llegar a los 14 años cuando siguiendo su pasión por la pintura y la fiesta taurina, emprendió un viaje a la Ciudad de México, lugar donde conoció a Antonio Navarrete, hombre que lo impulsó a seguir los dictámenes de su corazón y encontrar su verdadera vocación: la pintura.
Luego de pulirse como pintor, González Juárez buscó un espacio en su tierra natal para exhibir su talento, cosa que al principio no le fue fácil, ya que no era aún reconocido.
Fue hasta la década de los años 70’s cuando los sacrificios y esfuerzos por dar a conocer su arte rindieron frutos, al participar en el Festival Internacional Cervantino, evento que lo colocó como uno de los mejores pintores guanajuatenses.
Entre los legados imborrables que deja en Irapuato se encuentra el gran mural plasmado en el salón Juárez del Palacio Municipal y en el salón de Cabildos.
“El Charro” González siempre conservó un estilo único, identificado por sus imágenes de naturaleza muerta, paisajes y retratos con trazos violentos, toques precisos y empastes de color armónico.
En el año 2010, el legado a través de la historia lo llevó a ser acreedor de la presea Vasco de Quiroga, reconocimiento que se otorga al irapuatense que a su paso deja una huella como la que dejó “Tata” Vasco.
En aquel merecido homenaje, realizado el 15 de febrero del 2010, Antonio González dijo sentirse feliz y emocionado, ya que aquello que le ofrecía su tierra y su gente lo llenaba de orgullo.
Con 86 años de edad, la muerte de Antonio González provocó gran consternación entre los artistas de Irapuato, quienes se reunieron y acompañaron a la familia González en la misa realizada en la funeraria Gayosso.
Para dar el último adiós a Antonio “El Charro” González, el Museo de la Ciudad ofreció un homenaje de cuerpo presente al artista irapuatense.
A montar guardia acudieron artistas reconocidos como Federico Ramos y Salvador Almaraz.
En el homenaje, Atala Solorio Abreu, directora del Instituto Municipal de Cultura, Arte y Recreación, dirigió un breve mensaje: “En próximos días se realizará un homenaje con obras del gran pintor”.
Sixto Zetina Soto, presidente municipal, también acudió a darle el último adiós a “El Charro” González.
Luego del merecido homenaje, donde frente al féretro un autorretrato acompañó a Antonio González, familiares, amigos y la sociedad de Irapuato acudió al panteón Jardines del Tiempo.
El cuerpo de un gran pintor abandonó esta tierra pero su recuerdo y sus grandes obras no impedirán que el olvido algún día llegue, ya que a nivel internacional Antonio González Juárez siempre será recordado como el excelente pintor irapuatense.
Entrevista con su esposa:
“Mi esposo fue una gran persona, tenía una manera de pensar muy limpia, muy sabia, su carácter de él siempre fue bueno, siempre estaba disponible para pintar, para atender a la gente, tenía un carácter muy bonito, desde que amanecía se sentaba a pintar, él dejó un legado muy importante dentro del ámbito cultural.
“Dejó algunas cosas inconclusas, como la realización de un libro que él quería hacer, dejó mucha obra, su pasión siempre fue la fiesta taurina, porque él siempre quizó ser torero, nos dejó mucho legado a mí, a mis hijos, siempre estaremos orgullosos de él”, comentó su esposa, Estela Sandoval López.
