Irapuato, Guanajuato.- Un grupo de al menos 90 internos protagonizó un motín, rompió la puerta de acceso y escapó del centro de rehabilitación “Renace”, ubicado en la comunidad El Guayabo. Tras los hechos, se generó pánico entre familiares, quienes acudieron al lugar para recoger a sus internos.
Autoridades municipales descartaron que se hubiera registrado un ataque armado en el centro de rehabilitación.
Por su parte, la directora del centro confirmó que los internos que escaparon eran solo una parte de los residentes y que ya se trabaja en localizar al resto.
Los hechos fueron reportados al 911 a través de varias llamadas que alertaban sobre un motín y, presuntamente, detonaciones de arma de fuego en la comunidad El Guayabo.
Agentes de la Policía Municipal se trasladaron al lugar, pero las detonaciones reportadas resultaron ser un reporte falso.
La movilización incluyó el despliegue de diversas unidades de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, quienes acudieron para controlar la situación.
De acuerdo con versiones de familiares, un grupo de al menos 90 internos se encontraba realizando actividades habituales cuando, de forma repentina, uno de ellos habría dado una señal para que los demás lo siguieran.
La situación rebasó al personal del centro, y los internos lograron escapar, incluso, rompiendo el portón principal, lo que provocó una explosión al dañar un cable eléctrico.
En total, se estima que más de 90 internos, de los aproximadamente 140 con los que cuenta el centro, huyeron en distintas direcciones. Algunos fueron alcanzados en las calles por el personal del lugar.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana, a través de su área de comunicación social, informó:
“Mediante el Sistema de Emergencias 9-1-1 se recibió un reporte de detonaciones de arma de fuego en la comunidad El Guayabo.
Personal de Policía Municipal se trasladó al sitio; dicho reporte resultó ser falso.
En el lugar se tomó conocimiento de la salida de personas que se encontraban en rehabilitación.
Personal de Policía Municipal brindó asesoría a los encargados del sitio para las acciones correspondientes”.
Por otro lado, familiares denunciaron presuntas agresiones dentro del centro de rehabilitación:
Cuando yo estuve aquí me golpearon, yo le decía a mi mamá, pero no me creía, ¿sí o no te dije?”, comentó una joven que tiene a su hermano internado, quien habría sido uno de los que escaparon.
Uno de los internos que escapó durante el motín y posteriormente fue detenido de nuevo por personal del centro, declaró:
“Es que llegaron dos que andan buscando y los guardias de aquí abrieron la puerta para que nos fuéramos. Habemos 140 y escaparon casi 70”.
Al ser cuestionado sobre por qué no escaparon todos los internos, respondió: “Los que se quedaron son los que ya están mal, puro loquito. A mí me encontraron aquí en el Oxxo, pero no sé ni dónde estoy”.
Además, señaló: “Nos agarraron como a siete, todos estamos golpeados, todos descalabrados”, mientras mostraba lesiones en la cabeza y brazos.
Isabel Hernández, directora del centro de rehabilitación, habló en exclusiva para AM y negó las versiones de un ataque armado:
Se habla de una balacera, de un ataque armado, y pues malamente, por otros centros que no están regulados, la llevamos todos. Nos ha costado mucho esfuerzo tener regulado el centro, cada permiso, y no tenemos nada que esconder”.
Sobre lo ocurrido, declaró:
“El día de hoy tuvimos una fuga, un motín, como deseen llamarle. Aquí, lamentablemente, con uno que se prende, lo sigue otro. Eso fue lo que sucedió.
La explosión fue al momento de abrir el portón; se tronó un cable, lo que provocó la explosión y nos dejó sin luz de este lado. No hubo detonaciones. Los usuarios, dentro de lo que cabe, están seguros”.
Aunque la directora no quiso confirmar el número exacto de internos ni la cantidad de personas que escaparon, mencionó:
“La cifra es alta, te puedo comentar que nuestro servicio es grupal, pero prefiero omitir la cantidad”.
Y finalizó:
“Aquí seguimos trabajando, aquí seguiremos, y Renace no se va a caer”.
Hasta cerca de las 11 de la noche, familiares de los internos continuaban llegando al lugar en vehículos y motocicletas, algunos solo para informarse y otros para llevarse a sus internos.
AAK
