Decenas de personas se congregaron ayer en la parroquia de San Francisco de Asís, en Tlahuelilpan, donde el obispo de Tula ofició dos misas de cuerpo presente; en cada una de ellas había cuatro féretros de personas que fallecieron en el incendio de una fuga de hidrocarburo la tarde del pasado viernes.
Derivado de la magnitud de la tragedia, el obispo de Tula, monseñor Juan Pedro Juárez Meléndez, acudió a oficiar la misa en la que dio un mensaje de resignación y consuelo a familiares y amigos de los difuntos.
Conforme pasan las horas, el número de fallecidos va en aumento, mientras que disminuye la cifra de heridos.
Recuerdan a ocho personas, en ceremonia que ofreció ayer el obispo de Tula. Foto: Especial
Luto desde el domingo
Desde el domingo anterior comenzaron los funerales y entierros de las personas que perdieron la vida en el incendio de la comunidad San Primitivo.
No obstante que los difuntos son de distintas partes de la zona, la mayoría de las víctimas se concentra en Tlahuelilpan, donde el luto se prolongará por varios días.
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