Como es su costumbre, esa mañana de lunes, Manuel Escamilla inició sus actividades desde temprano. Bebió un café para tener más energía, desayunó un plato de arroz con un huevo y se preparó para salir a “corretear la chuleta”, como dicen en la Ruta 47 de combis en la que trabaja.
 

Todo indicaba sería una jornada normal. Subió a la Urvan, ajustó el asiento, echó a andar el motor y arrancó en dirección a la colonia Carboneras, Mineral de la Reforma, donde está la base de combis en la que trabaja. 
 

Después de “hacer fila” y esperar unos minutos a que salieran otras combis, por fin inició su primer recorrido, de la colonia Carboneras (Mineral de la Reforma) hasta el Centro de Estudios para el Desarrollo y la Investigación de las Ciencias Sociales (Cedicso), en Pachuca. 
 

Justo al pasar frente a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), las banderas rojinegras presagiaron que ese día no marcharía del todo bien para Manuel. No pasaron ni cinco minutos cuando se percató de que ese día no habría mucho pasaje.


 
Al llegar a la base las malas noticias continuaron: “¿Qué crees?, vas a tener que bajarte (de la combi) hoy por lo de la huelga de la Universidad, nos abemos para cuándo terminará y bueno, tú ya sabes cómo es esto”, le dijo el encargado del sitio en Cedicso.
 

La huelga de maestros y trabajadores que inició el domingo pasado al mediodía, dejó sin clases a 45 mil estudiantes en el estado, además de sacar de circulación a 12 de las 53 combis de la Ruta 47 del servicio público en esta troncal que transporta diariamente a miles de estudiantes de educación media superior y superior.
 

En entrevista con AM Hidalgo, Manuel (quien por razones personales pidió que le cambiaran el nombre) comentó que fue uno de esos 12 trabajadores del volante afectados. Sin embargo, para sacar un poco más, el checador le dio permiso de completar la vuelta de regreso a Carboneras.
 

“Prácticamente más del 50 por ciento del pasaje que nos beneficia son estudiantes de la autónoma. Los días que mejor nos va son de lunes a viernes; empezamos desde las 5:30 de la mañana y le paramos hasta las 10:00 de la noche, bueno, todo depende si hay pasaje”, comentó.
 

Con un día de descanso en fines de semana, Manuel realiza en promedio siete vueltas de Ciudad Universitaria hasta el Cedicso, principal itinerario de los universitarios ya que los conecta con diversos puntos educativos como la Preparatoria 3, la facultad de Medicina, la dirección de servicio social, el Cevide, entre otros.

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