A la par de aquellos equipos que tienen amarrado su boleto a la liguilla del torneo Clausura 2013 de la Liga MX, existen historias opuestas, de aquellos clubes de los que se esperaba más y terminaron por desilusionar a su afición con una decepcionante actuación.
Son escuadras que, ya sea por tradición o por plantel, pintaban para mejores cosas y terminaron marginados de la pelea por el título, con pobres resultados y que generaron muchas dudas, que los llevaron a la eliminación prematura.
Chivas:
La temporada del Rebaño terminó como inició: de manera desastrosa. Los tapatíos destituyeron al estratega holandés John Van’t Schip a unos días de que arrancara el torneo y, en su lugar, se trajo de vuelta a Benjamín Galindo, quien tuvo poco tiempo para preparar al equipo.
El resultado fue un total caos para las Chivas, que suman 16 puntos en igual número de jornadas y corren el riesgo de terminar en el último lugar general si pierden ante Xolos y se combinan resultados.
Lesiones, sanciones, baja de juego de futbolistas importantes e, incluso, errores arbitrales en su contra, terminaron por sepultar al Rebaño, que tuvo una temporada para el olvido, malogrando todas las oportunidades que tuvieron para hacer un papel más digno. ¿Fracaso? ¿Decepción? Sin duda, Chivas no estuvo a la altura.
Tijuana:
El actual campeón del futbol mexicano se quedó sin la oportunidad de defender su título, en un torneo en el que fueron de más a menos, pues iniciaron con cuatro victorias consecutivas y después, poco a poco, fueron bajando su nivel, al grado de que ahora tienen una racha de tres derrotas al hilo.
Los dirigidos por Antonio Mohamed le dieron, en apariencia, mayor importancia a la Copa Libertadores, lo cual provocó la caída de su juego en la Liga MX, en la que, con 18 puntos, están fuera de cualquier opción de calificar a la llamada “fiesta grande”.
Su temporada no puede considerarse totalmente un fracaso, pues la serie ante Palmeiras podría salvarlos de las críticas. Una de las razones de su debacle está en la pérdida de la solidez defensiva, su principal característica, pues han recibido 21 anotaciones en lo que va del torneo.
Toluca:
Si algo caracterizó al equipo de Enrique Meza en la presente temporada fue la irregularidad, pues lo mismo tenían momentos brillantes que caían en un marasmo futbolístico que no les alcanzó para pelear ni en la Liga ni en la Libertadores al quedar eliminados de ambos.
El subcampeón mexicano termina sumergido en dudas, con tres derrotas consecutivas y con la renuncia en la mesa del “Ojitos”, quien anunció que no renovará su contrato, ante los malos resultados cosechados.
Todavía en la jornada anterior, ante Monarcas, mantenían una ligera opción de mantenerse en la pelea, pero la derrota los deja con 18 puntos, muy lejos de lo esperado y sin opciones de calificar.
León:
Después de que en el torneo anterior fueran la revelación, a La Fiera se le olvidó el buen juego y naufragaron en el Clausura 2013, en el que apenas han sumado dos victorias, a cambio de siete derrotas e igual número de empates, que lo tienen en el fondo de la tabla con 13 puntos.
Las incorporaciones de Rafael Márquez, Nery Castillo y Yovani Arrechea no fueron la solución para los dirigidos de Matosas, que dejaron de ser aquel equipo ofensivo que consiguió anotar en todos los juegos de la temporada regular del torneo anterior.
De estar en los primeros sitios del torneo anterior, ahora los esmeraldas están en el fondo, con el riesgo de terminar en el sótano, aunque sin sufrir por el problema del descenso, un tema en el que tendrán que pensar seriamente en el futuro.
Pachuca:
Los Tuzos optaron por prescindir de Hugo Sánchez y darle la oportunidad a Gabriel Caballero en el timón; sin embargo, el resultado fue el mismo: los Tuzos se quedarán- salvo un milagro- fuera de la liguilla.
Pachuca había iniciado bien el torneo, pero cuatro derrotas consecutivas los alejaron de la Fiesta Grande, a la que sólo podrían acceder si golean a Jaguares y Monterrey es goleado por Cruz Azul. Los Tuzos tienen 20 unidades y -6, mientras que Rayados tienen 23 puntos y +4.
Los hidalguenses verán por segundo torneo consecutivo la liguilla desde su casa, un fracaso para una institución que se ha acostumbrado a ser protagonista.