León, Guanajuato.- Luego de más de siete años de sequía, la Sierra de Lobos, Vergel de la Sierra y la Cuatralba, que son los principales pulmones de León, recobran su esplendor y su magia.
Hace un año se discutía que no llegaba agua a la presa de El Palote porque se habían construido nuevos bordos en Sierra de Lobos y que se habían desviado cauces hacia el fraccionamiento El Molino.
De acuerdo al reporte de Protección Civil de León, la presa El Palote llegó a estar al 118 % de su capacidad, y hoy en día está al 88 % y ya se ha dejado de extraerle agua; presas de contención de avenidas, como es Echeveste, Duarte, La Laborcita, Lucio Blanco, Media Luna, La Manzanilla se encuentran a toda su capacidad.
También PC informó que los más mil 200 bordos que hay registrados en la zona norte, Sierra de Lobos, Los Alisos, el Gigante, se encuentran a su máxima capacidad, luego de que se este año se tuvo un registró de 705 mm (litros por metro cuadrado), según el último reporte de Sapal al 24 de octubre, superando la media histórica que es de 627 mm.
Se ha tenido un excelente año en cuestión de lluvia. La presa de El Palote no se llenaba porque no había llovido suficiente en la sierra de Lobos. Ahora bordos y represas están llenos y se están monitoreando”, dijo Crescencio Sánchez Abundis, titular de PC León.
Es por ello que la Sierra de Lobos luce su magia y esplendor e invita a los amantes de la naturaleza al senderismo.
“Fue un gran año de lluvia. Hay pastos y los aguacates están llenos. El agua es vida y la sierra luce sus mejores galas, y solo hay que cuidarla. Si se acude a paseo o senderismo, no hacer fogatas, y no meterse a los estanques porque resulta peligroso”, dijo un ganadero de registro, Ernesto Dávila Aranda.
Pega inseguridad en la Sierra de Lobos
Lamentablemente la inseguridad ha generado que muchos propietarios de cabañas impidan los accesos a áreas comunes, y han construido zanjas a la orilla de la carretera para impedir que los automovilistas se estacionen, más en la llamada zona de Los Panales, un lugar espectacular, con una cañada impresionante, por donde corre un arroyo de agua cristalina.
“Es lamentable que los ciudadanos tomen medidas de seguridad ante asaltos y robos que se han registrado en la carretera León-San Felipe por la falta de vigilancia; pero la sierra es todo un refugio para aves y gran variedad de fauna silvestre. Hace años había hasta lobos, águilas reales, sin faltar la víbora de cascabel, que salen a asolearse en los peñascos”, señaló Luis Manuel Delgado, vecino de Comanja de Corona.
JRL
