Guanajuato.- La cadena alemana Deutsche Welle (DW) presentó un documental sobre la crisis de violencia y desaparición de personas en México, en el que aborda el caso de la familia Barajas Piña, que ha vivido esta tragedia en carne propia en Salvatierra, Guanajuato.
El video titulado “México: Guerra de los cárteles de la droga” inicia con el recuento de los hallazgos en el Rancho Izaguirre, registrados en marzo de este año, descrito como escenario de reclutamiento forzado y asesinatos de jóvenes. La producción plantea que el poder del Estado mexicano se ha debilitado por la corrupción, lo que ha provocado la desconfianza de los familiares de las víctimas hacia el aparato de justicia.
Entonces, se da paso al testimonio de Javier Barajas.
Ahí (en Salvatierra) el que manda es el grupo delictivo; el gobierno es el que está a las órdenes de los grupos delictivos”, advierte el activista, acompañado de su esposa, María de Tránsito Piña.
Ambos son los padres de Lupita y Francisco Javier. Ella fue víctima de desaparición forzada por particulares en febrero de 2020 y su cuerpo fue encontrado en una fosa clandestina. Él, abogado que se sumó a la búsqueda de su hermana, era integrante de la Comisión Estatal de Búsqueda y fue asesinado en mayo de ese mismo año. Por ello, sus padres fueron obligados a exiliarse; ya no viven en Guanajuato.
La violencia que no cesa
El documental explica a una audiencia internacional el contexto de la violencia:
México se encuentra en el centro de una guerra contra el narcotráfico que no deja de intensificarse. Desde 2006 se cuentan más de 400 mil personas asesinadas y más de 125 mil desaparecidas. Pero el conflicto va más allá de las fronteras del país”.
A través de mapas, animaciones, imágenes de archivo y testimonios de especialistas, periodistas en el exilio y de la familia Barajas, DW busca profundizar en la crisis de inseguridad que afecta a México.
El narrador relata que los Barajas luchan desde hace años para que se haga justicia por sus dos hijos asesinados, mientras repasa el caso de la desaparición de Lupita, cuya búsqueda -emprendida por su familia y varios colectivos- derivó en el mayor hallazgo de cuerpos en una fosa clandestina del estado.
“Nosotros vivíamos muy tranquilos (en los tiempos en que desapareció Lupita); ahí empezó la delincuencia (…) Ni me imaginaba que hubiera tantos desaparecidos ahí, porque fueron 80 en esa fosa, más lo que faltan. Y nadie decía nada, porque toda la gente estaba asustada”, relata Tránsito Piña.
En la descripción del video se indica que “la historia de los Barajas Piña refleja una profunda crisis de desaparición e impunidad que atraviesa todo México, donde miles de familias siguen buscando a los suyos con poco apoyo de las autoridades”.
Crisis que rebasa fronteras
La voz en off recalca que más de 125 mil personas están reportadas como desaparecidas, víctimas de reclutamiento forzado, trata de personas u otras circunstancias, muchas veces por estar en el lugar y momento equivocados.
El documental también aborda la corresponsabilidad de otros actores en la problemática, como el Gobierno de Estados Unidos y la industria del entretenimiento, que con series como Narcos glorifican a los líderes delincuenciales.
Se advierte que se han normalizado delitos como la elaboración de drogas en laboratorios clandestinos y la existencia de fosas comunes en zonas urbanas o semirrurales, además de que las cifras de personas asesinadas en los últimos años se comparan con las de países en guerra declarada.
Exigen justicia desde el exilio
El documental cierra con las palabras de Javier Barajas:
Mientras no haya condenas, no habrá justicia ni estabilidad”, sentencia.
El narrador concluye que México requiere reformas profundas y apoyo internacional para frenar los mercados de drogas y armas, así como el flujo de dinero ilegal.
El documental tiene una duración de 25 minutos con 57 segundos, fue publicado a principios de octubre y ya suma casi 450 mil reproducciones en YouTube, mientras que la versión en Facebook está por alcanzar las 10 mil vistas.
Disponible en YouTube:
Desaparición de la maestra Lupita y su hallazgo en una fosa
La maestra Lupita desapareció el 29 de febrero de 2020 en Salvatierra. Fue hasta el 19 de febrero de 2021 cuando sus restos fueron identificados, tras haber sido encontrados en octubre de 2020 en una fosa clandestina del barrio de San Juan.
En total, se localizaron 80 cuerpos en lo que sigue siendo la fosa clandestina más grande descubierta en Guanajuato, lo que llevó a una investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE) en la que se vinculó a cuatro personas como presuntas responsables.
No obstante, el 21 de agosto de 2024 una jueza del Juzgado de Oralidad Penal con sede en Acámbaro absolvió a los implicados. La sentencia fue apelada por los padres de Lupita, Javier Barajas y María del Tránsito Piña, así como por el Ministerio Público.
Así lo recapitularon los abogados del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh) en entrevista con AM, donde explicaron que esta apelación llegó al magistrado de la Cuarta Sala en materia penal del estado de Guanajuato.
Se revocó esta sentencia el 29 de noviembre de 2024, es decir, posterior a dictar una sentencia absolutoria, se dictó una sentencia condenatoria por parte de la Cuarta Sala”, relató Ivette Galván García, coordinadora del Área de Defensa del Centro Prodh.
Aunque se emitió una sentencia condenatoria por el delito de desaparición contra cuatro personas, dos de los involucrados, entre ellos Carlos Manuel “N”, recuperaron su libertad.
“Al momento que se notificó la sentencia condenatoria, ellos dos no se presentaron a la audiencia. Y en ese momento, el Tribunal de Enjuiciamiento de Acámbaro los declara sustraídos de la acción de la justicia (prófugos)”, explicó la abogada.
Carlos Manuel estuvo prófugo desde el 16 de diciembre hasta que fue detenido el 9 de abril, “derivado de los esfuerzos de la familia, de estar dándole seguimiento al proceso y viendo cuáles eran los avances de la localización”, apuntó.
No obstante, el acusado ya había tramitado un amparo y, gracias a una suspensión concedida por la Cuarta Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia, a cargo de la magistrada Gabriela Berenice Pinedo, logró quedar en libertad.
“Al momento que se le captura, se emitió una boleta de libertad, diciendo que en el marco de este juicio de amparo era procedente decretar una suspensión que implicara poner en libertad a esta persona y que siguiera el proceso del amparo en libertad hasta en tanto no existiera una sentencia en el tribunal colegiado”, indicaron.
El caso refleja la falta de protección y la impunidad que enfrentan las familias buscadoras: mientras el asesinato de Javier tuvo sentencia, uno de los implicados en la desaparición de Lupita fue liberado y otro detenido recientemente obtuvo la suspensión de su orden de aprehensión, decisión que la familia, con apoyo del Centro Prodh, busca revertir ante el Poder Judicial Federal.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha señalado este caso como paradigmático, junto al de Teresa Magueyal y María del Carmen Vázquez, por la violencia contra defensores y buscadores en Guanajuato. Hoy, los Barajas Piña encarnan la resistencia y el costo humano de la búsqueda de verdad y justicia en un estado donde -según el Movimiento por Nuestros Desaparecidos– cinco familiares buscadores han sido asesinados entre 2020 y 2023.
DAR
