El líder regional del CJNG en Chiapas, Juan Manuel Valdovinos, “El Señor de los Caballos”, escapó de un operativo para capturarlo. En respuesta, los malitos bloquearon carreteras, incendiaron coches y paralizaron numerosas comunidades en cuatro municipios de ese Estado. Ya podrán imaginar que los chiapanecos vivieron horas de intensa zozobra, ésta inútil, pues el blanco del operativo se les escapó.
No dudamos que los oficialistas tengan “n” cantidad de pretextos para justificar este operativo fallido que, a pesar del enorme despapaye que armaron, solo permitió detener a tres personas, una de ellas mujer. Estos hechos coinciden con el asesinato, afuera de los juzgados del PJ de la CDMX, del conocido abogado David Cohen.
Recordemos que a la Jefa de Gobierno le asesinaron recientemente a dos de sus subalternos inmediatos, y atentaron contra una lideresa de comerciantes, diputada y defensora de derechos LGBTQ. ¡Pero dicen, afirman y aseguran los oficialistas que ha bajado el índice de asesinatos! Sin duda, un “error” de clasificación, pues ahora a los muertos los colocan en la columna de “desaparecidos”, o sea que para los autócratas que nos gobiernan no están muertos, simplemente no los encuentran por ningún lado.
Y a propósito de no encontrar gente, nos parece que a nuestra Presidenta se le perdieron los mandatarios de los países democráticos de Latinoamérica. El lunes dijo que no asistiría a la Cumbre de las Américas porque no invitaron a Cuba, Venezuela y Nicaragua.
A las tres dictaduras barbáricas que tienen subyugados a sus pueblos, ¡claro que no las invitan!: es una reunión de naciones latinoamericanas libres, con aceptables grados de democracia. Al rehusar asistir por tal causa, nuestra Presidenta, una vez más, se alinea con los tiranos, los defiende y se identifica con ellos.
Hay de causas a causas: una cosa es defender la democracia, como lo ha hecho casi toda su vida la Premio Nobel de la Paz, orgullo de (casi) todas las mujeres -salvo nuestra Presidenta-, María Corina Machado, y otra muy diferente es defender a los tiranos que someten a sus pueblos. Esto, tristemente, nos recuerda un dicho muy mexicano: “Aves del mismo plumaje vuelan juntas”.
Volviendo al caso del capo escapado en Chiapas: ¿dónde estaban los helicópteros del Ejército o de la Guardia Nacional para apoyar a las fuerzas de tierra en la captura de este -supuestamente- peligroso capo del CJNG? O de plano son ineptos para planear operativos o la “operación” fue uno de esos apantallajes mediáticos en los que aparentan hacer… sin lograr nada.
Y mientras, ¿cómo andamos en Sinaloa? ¿Ya mero pescan a las cabezas de “Los Mayitos” o de “Los Chapitos”? ¿Qué pretexto emplean los oficialistas para explicar los dos ataques directos contra familiares del gobernador Rubén Rocha Moya y escoltas? Nos acongoja a todo México que nos acechen desastres de todo tipo, naturales y no naturales.
Curioso que mientras la gente afectada por la lluvia en nuestra costa del sureste espera ayuda, la Presidenta apela a la iniciativa privada, a la misma que no quiso escuchar cuando, ante los legisladores, argumentaban los daños colaterales que el incremento en el IEPS causaría a nuestra economía. A esos mismos que no atiende ni toma en cuenta, ¡ahora pide que le ayuden!
Pero que le ayuden a realizar labores que le tocan en exclusiva al Gobierno, que nunca debió haber desaparecido el Fonden: error garrafal de su antecesor, a quien no osa ni contrariar, menos criticar. ¿O qué no pagamos impuestos los ciudadanos precisamente para dotar al Gobierno de recursos con los cuales atender las necesidades de la población?
Y ya que hablamos de explicaciones, ¿cuál nos ofrecen respecto a las cincuenta visas canceladas a morenistas por el Departamento de Estado norteamericano? ¡Cincuenta narcopolíticos que ayudan o encubren o facilitan delinquir a los cárteles de la droga! El gato de la conveniencia partidista les mordió la lengua, pues de esta vergüenza nacional no dicen ni pío.
