Dicen que un rayo no cae dos veces en el mismo sitio y para ello se exhiben pruebas irrefutables. Al Empire State Building de Nueva York le caen dos docenas cada año. El impacto lo recibe su bien protegida antena que capta, conduce y disipa la electricidad de manera tal que ante una descomunal tormenta ha llegado a resistir ocho impactos en tan sólo 24 minutos. Con la correcta atención y tecnología, se previenen posibles desastres y nuevos riesgos, esto aplica no sólo para los rayos sino para otros desastres como los incendios, que provienen en muchos casos de la mano del hombre.
Al igual que los rayos, como se volvió a atestiguar esta semana, los incendios también pueden repetirse en el mismo sitio en esta ocasión en el botadero de basura de Guanajuato Capital,. Aunque es algo común en los poco regulados puntos de disposición final de desechos en el estado, están frescas en la memoria las imágenes del incendio de mayo de 2023 que, además de cubrir de humo y cenizas a la ciudad, nos regaló histriónicas imágenes del presidente municipal de turno, Alejandro Navarro, durante la extinción de las llamas.
Tras las elecciones del año pasado, el problema de la mala disposición de los desechos pasó de un cónyuge a otro. Y pese a las advertencias, a la inversión que dicen haber realizado en el lugar, tres millones de pesos en apagarlo entonces y diez más para instalar una nueva celda, el tiradero sigue sin cumplir las normas de la SEMARNAT.
Sería muy curioso que alguien quisiera prenderle fuego en temporada de lluvias, pero aduce la presidenta actual que fue un incendio provocado y aunque no haya hecho públicas las pruebas de ello. Por otra parte, y como es costumbre con los gobernantes municipales obsesionados con su imagen, no dudó en tomarse fotos en el lugar de los hechos, como en un remake buena onda y menos caricaturesco que el de su esposo hace dos años. Con gorra y una camisa que dice “estoy para servirte” posó junto a los montones de desechos chamuscados, además de retratar en fotos aparte a la cuadrilla destinada a sofocarlos.
Como si la actual administración de Samantha Smith no tuviera suficiente con los escándalos ocasionados por su coordinador general de Administración y marchante de Rolex, Ludovico Mata; con los negocios de tierras y conflicto de intereses de su clan en la obra pública del municipio; con la dudosa adjudicación del sistema de semaforización que implicó recortes en otras áreas, y la actuación poco decorosa de su policía.
Con apenas un año en la función el desgaste de la actual administración es poco halagüeño de cara a las aspiraciones de su grupo hacia el 2027. No les vendría mal un pararrayos como el del Empire Estate.
Comentarios a mi correo electrónico: [email protected]