El economista Carlo Cipolla fue un experto en la estupidez. Sus teoremas son divertidos y tristes (relee “La invasión de los estúpidos”).

En el centro está la regla de oro: un estúpido provoca pérdidas a otro sin que sus acciones le deriven utilidad o inclusive le dañan.

Derivado de esta regla, Cipolla creó 4 cuadrantes para ubicar a cualquiera dependiendo de los beneficios o daños de sus acciones:

1. Inteligentes. Su actuar beneficia a los involucrados.

2. Desgraciados. Se dañan mientras benefician a terceros.

3. Bandidos. Dañan a terceros para recibir un beneficio.

4. Estúpidos. Acciones sin sentido: todos pierden, nadie gana.

Tristemente, los pentontos operan sus estupideces en todos lados.

Por ejemplo, mmm, déjame pensar… ¡los aranceles de Donaldo J. Turmp!

“Pensaría uno que una empresa contenta con los aranceles al aluminio sería Alcoa, el productor estadounidense. Pues piénsalo de nuevo: la empresa ejemplifica los efectos perversos del proteccionismo”, señala el Consejo Editorial del Wall Street Journal (WSJ).
¡Y eso que hasta hace poco el diario apoyaba a Trump!

El fantástico editorial explica perfecto la zoncera naranja:

* Estados Unidos (EU) importa 85% del aluminio primario. Alcoa es el productor doméstico más grande, pero 75% de su producción está en Canadá, por lo que importa 70% de sus ventas. Hasta febrero estas importaciones no tenían arancel. Hoy pagan 50%.

* Alcoa trasladará 215 millones de dólares trimestrales de sus costos arancelarios a sus clientes y absorberá otra parte. La empresa busca diversificar sus ventas a otros países, pero enfrenta competencia de otras naciones que quieren hacer lo mismo ante los aranceles.

* Alcoa difícilmente producirá más en EU. Los permisos llevarían entre 5 y 7 años y el costo de una nueva planta sería de 5,000 millones de dólares, 80 veces sus ganancias del 2024. Como las decisiones de inversión se toman con horizontes de 20-40 años, es imposible decidir ante lo voluble de Trump. Por cierto, ningún productor de aluminio ha anunciado inversiones.

* Respecto a reiniciar o ampliar capacidad en fundiciones existentes, las inversiones serían de cientos de millones de dólares y el incremento en la producción del país sería mínimo. Inclusive si todas las empresas domésticas operaran a plena capacidad, EU requeriría importar 3.4 millones de toneladas de aluminio al año, lo que equivale a ¡5 grandes plantas nuevas!

* Para producir aluminio, EU requeriría de mucho más electricidad y a precios más bajos. Alcoa necesita de costos eléctricos de 30 dólares por megawatt/hora por 15 años. Hoy paga entre 60 y 100 dólares por megawatt/hora. Sustituir todas las importaciones de aluminio de EU requeriría inversiones eléctricas equivalentes a 6 grandes reactores nucleares.

* Desde que se impusieron los aranceles, el empleo en el sector de metales primarios no se ha incrementado y el número de empleos manufactureros ha caído en 13,000 puestos.

¿Alguna duda?

Para mí no: la política arancelaria de Trump es estúpida.

Este es un solo caso; existen muchos. Ejemplo, las armadoras automotrices estadounidenses están bien encabritadas con los efectos de los aranceles. Pierden competitividad y muuucha plata.

Dicen los porristas de Mr. Trump que los aranceles funcionan de maravilla: las arcas del gobierno se llenan de dolarucos.

Es cierto. Cálculos del modelo presupuestario Penn-Wharton estiman que al cierre de julio los ingresos por aranceles en EU fueron 131% superiores a los del 2024, unos 72,000 millones de dólares adicionales.

Pero, OJO, como referencia el ISR federal en EU recaudó 2.4 billones (de los nuestros) de dólares, ¡33 veces más que esta alza en 7 meses!

Este es el punto clave: lo que pesa más en la economía de EU es la salud financiera de los estadounidenses. Hombre, el 69% de su PIB proviene del consumo privado.

Sí, 69%.

¿Y quiénes serán los más afectados por los aranceles?

Los consumidores, que terminarán pagando más. No hay vuelta de hoja, cuestión de tiempo.

Entonces, si las empresas ya sufren y los consumidores sufrirán, los aranceles no son una buena noticia, Mr. President.

No.

Signore Cipolla pondría su política arancelaria… ¡en el cuarto cuadrante!

En pocas palabras…

“En la política la estupidez no es desventaja”.

Napoleón

Twitter: @jorgemelendez

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