Luego del ataque armado en el que un policía perdió la vida y dos más resultaron lesionados en este municipio, el gobernador Julio Menchaca Salazar reconoció el riesgo inherente a la labor de seguridad y aseguró que su administración mantiene el compromiso de fortalecer a las instituciones encargadas de procurar justicia.
Así mismo expresó su respaldo a los cuerpos policiales y destacó la labor que realizan diariamente.
“El ser policía es una actividad de riesgo. Todos los días salen madres y padres de familia como cualquiera de nosotros, pero su trabajo es de alto riesgo”, afirmó.
Explicó que el trabajo de los agentes consiste en inhibir el delito y detener a personas involucradas en actividades ilícitas, lo que los expone constantemente a situaciones violentas.
“Nadie pensaría que al detener a alguien le van a abrir la puerta de su casa con tranquilidad. Desafortunadamente han coincidido eventos recientes, pero el secretario de Seguridad y el procurador ya están hablando con los elementos para que tomen precauciones”, añadió.
De igual forma aseguró que en el caso del ataque ocurrido en Tula ya se trabaja para dar con los responsables, y pidió a la ciudadanía confiar en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH).
El jefe del despacho de procuraduría general de justicia de hidalgo, Francisco Fernández Hasbun, informó que ya se tienen antecedentes de detenciones en hechos recientes relacionados con violencia en el estado.
“Hay 11 personas detenidas por los casos de La Loma y Tizayuca. En el caso de Tula estamos trabajando arduamente y pronto daremos noticias”, indicó.
Reiteró que su administración está comprometida con combatir la impunidad
“Nunca se había dado un proceso como ese en administraciones anteriores, y eso demuestra la voluntad política y la decisión para hacer más eficiente la justicia”, sostuvo.
