Chucuándiro, Michoacán.- José Alfredo Gallegos Lara, mejor conocido como “El Padre Pistolas”, celebró su cumpleaños 74 como vive su ministerio, sin tapujos, pero con más música, tequila y abrazos que de costumbre.
Nacido en Tarimoro, Guanajuato, ha estado en varias parroquias, la última de ellas, en Chucándiro, Michoacán, hasta donde este miércoles 9 de julio acudieron migrantes y bikers guanajuatenses, personas de varias partes de la República e incluso del extranjero, atraídos por la curiosidad o el morbo, sin descartarse el afecto sincero por alguien que no tiene miedo de decir lo que piensa.
Mario Hernández, integrante del Club Azteks 44 y residente en Cortazar, acudió con su hijo y otro amigo biker al festejo, para disfrutar de los paisajes y conocer al polémico personaje.
Al señor le gusta vestirse como las personas de antes: traer pistola, tomar aguardiente, andar a caballo, el estereotipo de charro”.
“Él ofreció la misa al mediodía y ofreció una comida para todos los que asistieron y estuvo un mariachi, una banda de viento y un trío”, con el que el Padre se animó a cantar.
Dijo que hubo unos 200 bikers, de Moroleón, Uriangato y muchos de Michoacán. Comentó que acudir al lugar es ya una tradición para este gremio.
Asistió incluso un joven de apariencia hindú, su turbante despertó interés entre los presentes.
Anduve recorriendo el templo, su casa, ya ve que los sacerdotes tienen ahí al lado su casa, vi que tiene varios cuadros de él, unas pistolillas que tiene en exhibición, varias cosillas”, dijo el motociclista.
Aunque aclaró que todo fue bajo un ambiente “familiar”, tranquilo, sin pleitos y con respeto por el padre.
En tanto que Rafael González, originario de Uriangato pero residente en California, llevó muestras de su tequila “Millón de voces” para celebrar al Padre Pistolas y agasajar a los presentes.
También le escribió una canción, se la cantó su esposa, Yesenia Rocha, cantante amateur.
¿Quién es el Padre Pistolas?
El Padre Pistolas es un sacerdote católico, controvertido y polémico. Presuntamente, desde joven, ha portado armas de fuego —pistolas y rifles— como una forma de protegerse de la violencia en la zona, y ha mantenido esa práctica ya siendo clérigo, durante su ministerio en comunidades rurales vulnerables, lo que no lo ha excusado de ser amonestado por eso.
Entre las armas de fuego, vocabulario soez, críticas abiertas a políticos y promoción a remedios caseros como supuestas curas para enfermedades graves, como cáncer y diabetes, su comportamiento le acarreó la suspensión de su licencia como sacerdote en septiembre de 2022.
En ese entonces, el Arzobispado de Morelia, le prohibió ejercicio del ministerio sacerdotal, no solo por el empleo de lenguaje vulgar y ofensivo, calumnias contra autoridades eclesiásticas y fieles, también por promover remedios desde el púlpito (durante la homilía de la misa), entre otras irregularidades.
Presuntamente en febrero de 2024 recuperó su licencia para oficiar misas, después de que le hicieran firmar una declaración donde se asume como difamador.
AAK