Tiene 68 años, desde hace 25 presta sus servicios al municipio, es la creadora y guardiana del mejor público que hay en la zona urbana de Tulancingo; utilizando material de reciclaje y de dinero de su bolsillo.
Se trata de Martina Miranda Gómez a quien se le puede observar de las 6.30 a las 15:30 horas laborando como jardinera en el área verde que se ubica en la entrada al centro de Tulancingo por la avenida Bento Juárez Sur y el bulevar Emiliano Zapata.
“Estuve trabajando 12 años en el departamento de limpias, pero no me hacían caso porque eran puros hombres, cuando fue presidente municipal Julio Soto pedí mi cambio, me mandaron para acá, esta horribilísimo había un contenedor de basura, no había pasto ni plantas, había miles de tordos negros, yo lavaba la banqueta con creolina cada tercer día hasta que se fueron”.
Concentrada corta el pasto escuchando música con sus audífonos, detiene de su trabajo para atender la entrevista.

Martina se aprecia de tener amistad con el gerente del cable, quien le ha proporcionado el material con el que ella ha tejido una especie de cerca de muchos metros: “llevó 8 meses haciéndolo, ya no se mete la gente me deja las plantas, sin maltratar”.
Ha ocupado botellas de plástico y llantas para hacer adornos también como protección a las plantas ornamentales, ha conseguido que se tatúen los árboles con bellos diseños: “ya tengo las ideas para más árboles, pero no he tenido dinero para comprar la pintura, todo lo sembrado yo lo he adquirido, nadie me da recursos”.
Rosas, agapandos, guayaba, buganvilia, granada, mora zarzamora, higos, nopales, una planta con una fina flor que ya pegó después de que la rescató de la basura y hasta epazote forman sus jardines.
“Ojalá que la gente lo valore, que la gente no diga que soy una vieja envidiosa y que por eso lo cerqué, pero no es eso es para poderlo conservar”, dice Martina quien de nuevo toma su herramienta de trabajo para continuar con su labor.
