León, Guanajuato.- ¡Llegamos al final de Feria de León! Y con esto, el olor, los sonidos y las emociones que durante 27 días estuvieron presentes en la edición 2025.
Haciendo un recorrido por los diferentes espacios de la feria, es imposible no toparse con los juegos de destreza, pero ahora, ya más tecnológicos, ya saben, para que sean atractivos para las nuevas generaciones.
Uno de los juegos que se renovaron fueron los de prueba de fuerza, antes, todo era manual, bastaba con dejar caer un marro de metal para demostrar cuán fuerte eres.
Eso quedó atrás, ahora, se volvió popular un medidor de fuerza digital que con solo golpear una pera de box, mide cuán fuerte eres; es incluyente, pues si eres delgado, te da un premio de consolación por golpearlo aunque no sea muy pesado.
Ahora el ‘Tiro al Blanco’ se modernizó, y no necesitas una pluma picuda para ganarte un premio, sino que basta con darle un pelotazo en el centro.
Ya no está la Lotería, eso sí sería muy retro, pero a cambio, quedaron las carreras de caballos con un cuaco de metal; para los más pequeños había excavadoras para simular que trabajas en la construcción. También los patitos en el agua, que tienes que atrapar a cambio de un premio.
La garra humana fue otra sensación, solo tenías que entrar con todo tu cuerpo a la máquina y tomar el oso que más te gustara.
La casa del terror sigue siendo un clásico, así que se mantuvo, pero ya no existe La llorona, Frankestein o Drácula; ahora está Eso, algunos hombres lobo -esos siguen dando miedo- y la muerte.
En fin, si no disfrutaste de estas atracciones tendrás que esperar 365 días para de nuevo vivir la emoción de la feria.
No puedo despedirme sin reconocer que fue una experiencia agotadora entre coberturas de espectáculos, y otras cosas, pero me quedo de nuevo con la satisfacción de haber podido añadir más recuerdos al baúl de mis nostalgias.
¡Los veo en el 2026!