El fruto más codiciado en diciembre es la uva, pues es un imprescindible para pasar las fiestas de fin de año . Foto: María José Soto

Con información de: Carlos Suárez, María José Soto y Francisca Zaragoza

San Francisco del Rincón, Guanajuato.- El fruto más codiciado en diciembre es la uva, pues es un imprescindible para pasar las fiestas de fin de año como Navidad, que se usa para las famosas ensaladas de fruta, pero en especial para el festejo de Año Nuevo, que la joya de la corona es la uva, por la cuenta simbólica de los 12 deseos.

En mercados de León, esta fruta alcanza por kilo hasta más de 170 pesos, mientras que en municipios contiguos como San Francisco del Rincón o Guanajuato capital, llega hasta los 200 pesos.

¿Por qué la uva es tan ridículamente cara?

Comerciantes explicaron que el alza de precios en la uva se debe a varios factores, entre ellos los más importantes son porque son un producto importado y por las heladas que recientemente han afectado a la industria agrícola.

Además, se explicó que la temporada de uva en México es en julio y agosto, por lo que en este mes decembrino los precios se esperaban más altos.

 

Mercados en San Francisco del Rincón. Foto: Carlos Suárez

 

Este año en San Francisco del Rincón se ha registrado escasez de uvas en fruterías y verdulerías, por lo que se ha reportado un incremento de hasta 60 pesos por kilo, mismo que ya cuesta hasta 200 pesos, lo que resulta un producto complicado de surtir para los comerciantes.

Uno de los rituales más comunes que se realizan en año nuevo son las características “12” uvas, que representan un deseo por cada mes del año, lo que suele generar un flujo económico considerable para los comerciantes.

Sin embargo, este año la situación parece ser muy distinta, pues vendedores del municipio señalan que el precio de las uvas se disparó considerablemente.

Durante un recorrido por distintos establecimientos, AM Express pudo percatarse de la escasez de esta fruta, a lo que los comerciantes indicaron dudar sobre si surtirla o no, ya que, de no venderlas, representaría una pérdida considerable.

“Voy a ver si puedo vender uvas, porque ahorita sí está bien para mí, me la venden a 200 el kilo, hay otra a 150, pero por lo general sale la mitad buena y la mitad mala y ahí sale mucha merma, no sé por qué estará escasa, si siempre para fin de año hay, pero sí está cara, una caja me solía salir en 700 y ahorita la he visto en mil 200”, comentó el encargado de una frutería.

Cabe señalar que en supermercados las uvas varían en sus precios, cuyos más bajos son de 79 pesos el kilo, sin embargo, algunos paquetes parecían tener la mitad de las uvas ya en mal estado o muy maduras.

En diciembre del 2023, el precio de las uvas rondaba de entre 140 a 160 pesos el kilo, lo que representa un incremento de hasta 40 por ciento, aproximadamente. 

La sidra baja de precio

Por otro lado, uno de los productos que al contrario de las uvas bajó de precio es la sidra, pues actualmente las botellas rondan de entre los 75 y 170 pesos, mientras que el año pasado se encontraban entre 70 y 195 pesos.

 

Vinaterías en San Francisco del Rincón. Foto: Carlos Suárez

 

Sin embargo, los comerciantes de vinícolas aseguraron que aún y con la reducción del precio las ventas han sido bajas aún y en temporada navideña, por lo que esperan recuperarse este Año Nuevo, donde algunos establecimientos trabajarán hasta la media noche.

Así festeja la familia Saldaña Martínez el Año Nuevo

Para la familia Saldaña Martínez, el Año Nuevo representa un día en el que pueden reunirse a compartir experiencias y disfrutar de una cena emblemática, incluso con familiares que viven en otras ciudades, lo que vuelve su celebración aún más especial.

En entrevista con AM Express, Anayeli Saldaña Martínez, compartió cómo es que ella junto a su familia celebran el Año Nuevo, el cual lejos de ser un día cualquiera se torna en una celebración cálida e inigualable.

 

La familia Saldaña Martínez, de San Francisco del Rincón. Foto: Carlos Suárez

 

La cena la realizan en la comunidad de donde son originarios, el Nuevo Mexiquito, que se encuentra en la zona sureste de San Francisco del Rincón, una de las más alejadas de la cabecera municipal y aunque muchos de sus integrantes viven lejos de donde crecieron, la distancia no es un impedimento para reunirse en familia.

Tengo familiares de León, entonces ellos como les gusta mucho descansar en el rancho porque es un lugar muy tranquilo pues siempre se juntan mis tíos, mis abuelos de parte de mi mamá y se van a mi casa, ahí todos nos reunimos y todos traen un poco de todo”, comentó Anayeli Saldaña Martínez.

Para esta fiesta, la familia celebrará con carne asada, así como otros complementos como lo es la ensalada de postre de manzana u otros platillos que la demás familia llevará.

La familia de Anayeli cierra con “broche de oro” con una fogata, la cual es alimentada por madera de los alrededores y donde, para finalizar la noche, se reúnen para contar historias y pasar un momento agradable.

“En estos días que está haciendo muchísimo frío no puede faltar la fogata donde nos ponemos en el jardín de mi casa, ahí mi papá se pone a juntar palos secos y ahí nos abrigamos todos, mis primos suelen asar bombones y salchichas y siempre están las historias”, finalizó.

Aseguró que ya está todo listo para que hoy en la noche se reúnan en familia, en un día que suele estar lleno de alegría y amor familiar.

También en la capital la uva está en $200 el kilo

Hasta 200 pesos tendrán que pagar las familias guanajuatenses por las uvas para la cena de Año Nuevo. Los comerciantes aseguran que la fruta no se ha vendido por lo caro y han tenido pérdidas económicas. 

En los mercados de Guanajuato capital los insumos de la cena de Año Nuevo han incrementado su precio en general entre 10 y 20 pesos, las hojas de maíz para los tamales en una semana llegaron a los 30 pesos de costar 20 pesos. Mientras que las guayabas que lleva el ponche de frutas está hasta en 50 pesos por kilo.

Ahorita para la cena de Año Nuevo lo que más ha subido es el maíz y la hoja de tamal, subió como 10 pesos por paquetito, para el ponche ha subido mucho la guayaba… Les recomiendo llevarse menos, en lugar de un kilo, que se lleven medio kilito”, mencionó Javier, comerciante. 

 

Mercados en Guanajuato capital. Foto: María José Soto 

 

Pero además, en esta fecha es muy común que las personas coman 12 uvas en punto de la medianoche una por cada deseo o propósito a cumplir el siguiente año. Sin embargo, debido al alto precio de las uvas hay familias que no podrán costearlo. 

“Le piensan por el gasto, 160 pesos sí es demasiado, excesivo. Se llevan menos en lugar de el kilo se llevan medio kilo o nomás las 12 uvas. Esta vez invertimos menos porque se va uno dando cuenta que semana con semana cómo se vende y ya se invierte menos porque invertir 1 mil 500 o 1 mil 600 en una cajita sí es demasiado”, mencionó Ignacio Tavares, vendedor de Embajadoras.

Y es que en el Mercado Embajadoras la uva verde de origen peruano está entre los 150 o 160 pesos el kilo, la uva roja con semilla solo 10 pesos más barata. En tan solo un mes, aumentó 40 pesos. Por otra parte, en el Mercado Hidalgo la uva verde está hasta en 200 pesos el kilo. 

Y en la Capital así pasarán el Año Nuevo

Jaime Cayetano celebra el Año Nuevo en compañía de su familia que cada año llega del Estado de México. Para ellos encender las 12 velas es una tradición para atraer las bendiciones en el año.

Cada año en la víspera de la Navidad y Año Nuevo recibe a sus parientes en total son 12, en ambas ocasiones el ambiente es completamente familiar y tradicional. Parten una piñata, cenan algún pollo o tamales. 

Su ritual para recibir el año con buena energía y para atraer bendiciones es encender 12 velas, una por cada mes, las cuales las llevan a bendecir. La noche del 31 de diciembre las dejan prendidas y luego solamente dejan la de enero, así cada mes prenden  una vela.

Las velas, regularmente las velas. Lo que hacemos es rezar un padre nuestro, pedir por todos nuestros seres queridos y nuestros semejantes, se quedan encendidas toda la noche para que esto siga adelante y a ver qué, Dios nos bendice”, mencionó Jaime. 

A diferencia de la Noche Buena, la fiesta de Año Nuevo se comparte con amigos o es más de fiesta. Desde hace algunos años Antonio Navarrete celebra con su familia elegida, es decir sus amigos. Usualmente lo hace con una cena 

“Nos gusta una cenita con platillos típicos de la época, ya sea lasaña, puré de papá, pollo y ver películas después. De tradiciones nos gusta pedir deseos con las campanadas de las 12 uvas, también aventar tu puño de lentejas y lo que caiga en la cartera, cargarás el resto del año”, relató Toño para AM. 

Para Toño, los rituales son una buena forma de atraer la buena fortuna y cree fervientemente que sí funcionan para no empezar el año con el pie izquierdo. Por eso es fan de aventar las lentejas de la abundancia económica. 

JRL

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *