Existe inseguridad en el Centro de Purísima, si no se llevan vehículos los desvalijan o los dañan para extraer lo que hay en el interior.
Luz María López, quien habita en Loma Ejidal, fue víctima el pasado lunes de destrozos a su camioneta Explorer 98 para robarle una mochila, apenas se bajó unos minutos de la camioneta con sus hijos, quienes dejaron mochila y uniforme adentro para acompañarla a hacer compras.
Cuando dejó la camioneta estacionada por la calle trasera de la Parroquia para ir a la compra de semillas y frijol, recuerda que una mujer se movió y se recargó en su camioneta, pero no consideró que esto fuera de riesgo.
Minutos después se regresó por el pasaje del Jardín Principal y estaba pitando la alarma de la camioneta, en eso una señora gritó “la roban” y fue entonces que la afectada reaccionó y vio correr a la misma mujer para subirse en un carro negro donde iban dos hombres.
“Hoy me doy cuenta que esa mujer se recargó en la camioneta con la total intención de cubrir a quien estaba violando las chapas de la camioneta y poderse llevar la mochila de la escuela con el uniforme de mis hijos, aparte de dejar dañado el vidrio de la parte trasera con un desarmador”, expuso.
No la apoya policía
Enseguida circuló por el lugar un policía por la zona del robo, y Lutz María López le pidió apoyo, que siguiera a los ladrones, pero el policía se rehusó, porque “él no puede perseguir a nadie, y es que él está comisionado a ser el guardaespaldas del Alcalde, pero como él estaba en Francia, pues nada más está por un momento en tránsito por el Jardín, que más bien tenía que llamar a una patrulla para que persigan”, contó.
Vista esta respuesta es que la ciudadana tomó la determinación y que le comentan de diferentes afectados en el Centro de la ciudad decidió hacer pública su denuncia, porque las autoridades aseguraron que la seguridad mejoraría, y no es así.
“El Presidente se acaba de ir a Burdeos, y supuestamente no hay mucho dinero, pero el Presidente se fue a Burdeos y para eso sí hay -no podrán tomar dinero, unos 10 mil pesos, para instalar cámaras en el centro-”, reclamó.
Esto mismo lo ha platicado con otros amigos, y coincidió que el último día del año un maestro fue a dar gracias, dejó estacionado su carro Tsuru cerca del templo y salió para ya no encontrar nada, a su vez donde estuvo a comprar el mandado le confirmaron que no es la única afectada, como ella ha habido muchas personas a las que les han robado sus vehículos.