La tarde de este viernes, ante su presidente nacional, César Camacho, rindieron protesta los candidatos del PRI a las alcaldías y diputaciones para la elección del próximo 7 de julio en Aguascalientes. Contrastando con los aplausos recibidos por la alcaldesa, Lorena Martínez y por el gobernador, Carlos Lozano, el candidato a la alcaldía del PRI, Francisco Chávez Rangel, despertó solamente tibios aplausos entre los militantes del tricolor.
En un Teatro Aguascalientes que al principio lució lleno y por momentos entusiasta, y que conforme avanzó la ceremonia de toma de protesta se fue vaciando hasta en ánimos, los priístas compitieron por las porras del “respetable”, notándose las diferencias que aún existen entre la alcaldesa y el gobernador.
Cada porra a Martínez era opacada de inmediato por porras a Lozano, pocas porras se conjuntaron de forma homogenea para exaltar al partido y a sus candidatos. Participaron como oradores el ex rector de la UAA y aspirante a una diputación local, Rafael Urzúa; la hija del gobernador finado, Francisco Guel Jiménez, Teresa Guel; la ex secretaria de turismo, Verónica Sánchez Alejandré, ambas candidatas a diputaciones y el ex director del Instituto de Educación, Francisco Chávez Rangel.
Discursos improvisados pero notoriamente distintos en calidad fueron los de Urzúa, Guel y Chávez Rangel. Guel se fue por el script del discurso escrito.
De los cuatro, solamente Urzúa pudo hacer que el público captara la atención, con un discurso sobrio, bajo de tono, pero sincero y sentimental, lo que provocó sin pedirlo los aplausos de los priístas reunidos.
Guel decidió declamar leyendo, lo que se notó de inmediato pues cortaba las frases y las ideas sin hacer que los priístas cansados pues algunos llevaban varias horas esperando a las autoridades, respondieran a las frases acartonadas.
Sánchez decidió improvisar tratando de levantar el ánimo de los ahí reunidos sin conseguirlo, pidiendo aplausos para las autoridades, candidatos, gobernador y alcaldesa. El momento del candidato “ancla” llegó, y la primer decepción también, pues al ser anunciado, los priístas que se habían mostrado entusiastas con Camacho, Lozano y Martínez, dieron una fría bienvenida al nuevo priísta y candidato.
Chávez empezó a hablar mostrando inseguridad, tal vez por el impacto causado por la falta de apoyo de los tricolores, para después de pedir aplausos para todos los presentes, empezar a hilar ideas sobre lo que representaron los 70 años del PRI en el poder durante el siglo anterior.
Volvió a los lugares comunes de las construcciones de escuelas y hospitales, edificados gracias al PRI; trató de conectar con el público haciendo referencia a los espacios públicos donde pasó su infancia gracias al PRI y al nacimiento de muchos de los presentes, en hospitales construidos por el PRI.
Posteriormente tomaron la palabra el presidente del PRI nacional y el gobernador, pero para entonces los priístas ya empezaban a abandonar el lugar.
Destacó que entre los candidatos del PRI no apareció la sobrina de Héctor Hugo Olivares Ventura, Elsa Amabel Landín Olivares y en su lugar, estuvo sentada la hija de Javier Aguilera jefe de gabinete del gobierno estatal, María de los Ángeles Aguilera.