Alegando motivos de salud, Elba Esther Gordillo pidió al juez federal que instruye su juicio permitirle no estar presente en ninguna de las 15 diligencias en las que se interrogarán a funcionarios y procesados, contrario a lo que en un principio había solicitado.
La ex lideresa magisterial pidió al Juez Sexto de Distrito en Procesos Penales Federales, Alejandro Caballero Vértiz, no requerirla en cada una de las audiencias que a partir del 17 de abril se llevarán a cabo en su proceso y que implicaría su traslado desde el Penal de Tepepan,en Xochimilco, al Reclusorio Oriente.
De acuerdo con información del Poder Judicial de la Federación, esta es la primera vez que Gordillo usa el tema de su estado de salud en su proceso. Según los informes recabados, la petición de Gordillo deberá ser ratificada.
De acuerdo con datos penitenciarios, desde el 11 de marzo el juez Caballero ya había girado instrucciones a los directores del Centro Femenil de Readaptación Social de Tepepan, para que garantizara los traslados de Gordillo a las diligencias.
También había hecho lo propio con el director del Reclusorio Oriente, para que facilitara la presencia en las diligencias de Isaías Gallardo Chávez y Juan Manuel Díaz Flores, quienes también están procesados por lavado y delincuencia organizada en el mismo juicio que la ex lideresa magisterial.
Arturo Germán Rangel y José Refugio González, los primeros defensores que tuvo Gordillo, solicitaron que su clienta estuviera presente en las comparecencias que tendrán lugar en el proceso y no refirieron a la salud como un motivo para evitarlo.
Sin embargo, la nueva defensa que encabeza Marco Antonio del Toro planteó una situación distinta y también renunció a algunas pruebas que habían solicitado los anteriores abogados, además de que pidió aplazar algunas que ya habían sido acordadas.
El Sistema Penitenciario del DF ha informado que, según los dictámenes médicos, la ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) presenta padecimientos crónicos de hígado, hipertensión y renales.
Las autoridades capitalinas tienen a Gordillo internada en Tepepan y no en Santa Martha, donde inicialmente fue recluida, por consideraciones médicas.
Sin embargo, el Gobierno del DF le ha otorgado a la maestra una concesión de la que ningún interno, hombre o mujer, puede presumir, pues desde octubre de 2011 existe un convenio que obliga a que los consignados por la PGR sean llevados a penales federales.
