“Damos la bienvenida al cambio y la apertura; porque creemos que la libertad y la seguridad van juntas, que el avance de la libertad humana sólo puede fortalecer la causa de la paz mundial. Hay una señal que los soviéticos pueden hacer que sería inconfundible, que haría avanzar dramáticamente la causa de la libertad y la paz. Secretario General Gorbachov, si busca la paz, si busca la prosperidad para la Unión Soviética y Europa del Este, si busca la liberalización, venga por esta puerta. ¡Sr. Gorbachov, abra esta puerta! ¡Señor Gorbachov, derribe este muro!”

Era el 12 de junio de 1987. Y, esas fueron algunas de las palabras pronunciadas por el entonces presidente de los EE.UU, Ronald Reagan. En este discurso, conocido como “Tear down this wall” (Derribe este muro), Reagan increpaba a  Mihail Gorbachov, máximo líder soviético en aquel tiempo. Esto sucedió al pie de la Puerta de Brandenburgo, para conmemorar el 750º aniversario de Berlín en Alemania.

El pasado miércoles 16 de junio, exactamente a 34 años de aquel pronunciamiento imperial, se han reunido en Ginebra, Suiza, Vladimir Putin, presidente de Rusia, y Joe Biden, de Estados Unidos. Ya no hay Muro en Berlín, la Unión Soviética es materia casi olvidada, la Guerra Fría acabó. Pero, el resultado de esta junta no es otro más que la continuidad en la tensión de las relaciones políticas entre dos potencias mundiales.

La cumbre entre los jefes de Estados de dos de las máximas potencias globales en el presente, parece ser la misma trama de una película muy vista a lo largo de toda la segunda mitad del siglo XX. Solo cambian los nombres, la situación geopolítica continúa siendo la misma que enmarcaban algunos filmes de espionaje de los años 60.

El cine de Estados Unidos y sus aliados, usaron al cine como la representación ideológica del poderoso bloque occidental surgido después de la Segunda Guerra. A través del discurso cinematográfico se encargaron de caricaturizar a sus enemigos. La gran mayoría de villanos en el cine de habla inglesa, producido en Reino Unido y Estados Unidos, desde los años 50 hasta principios de los años 90, eran soviéticos.

La historia del cine antisoviético comenzó con “The Iron Curtain” (El telón de acero), estrenado en 1948, primer filme que aborda la tensión entre la Unión Soviética y Estados Unidos. Todo occidente celebró el triunfo de Rocky sobre el ruso Iván Drago, ante los miembros del Politburó soviético; en la cinta de 1985 “Rocky IV”.

Tengo la plena certeza que después de la reciente reunión entre Biden y Putin, ya se cocinan algunas películas donde retornan los villanos rusos. Lo que sucedió el 16 de junio entre estos dos personajes es el guion de una película que ya vimos varias veces.

ACLARACIÓN                                                    
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *