La crisis económica ha golpeado a todos los sectores, y de manera válida, muchos han salido a las calles a buscar, de manera honesta y con mucho esfuerzo, recursos que permitan la compra de bienes básicos para la subsistencia propia y de su familia.

El problema, es que, para infortunio de la mayoría, la recuperación económica ha tardado mucho más de lo esperado y a pesar de que muchos hubiéremos deseado iniciar la misma, desde el mes de enero pasado, estamos cerca de cumplir el primer trimestre, con una inflación más alta de lo contemplado (por el incremento en las gasolinas y el gas), y sin recuperación monetaria perceptible.

La desesperación y natural desesperanza, ha logrado que “el índice de felicidad” para nuestro país se degrade, y del lugar 23 mundial, pasemos al 46, lo que quizá no es tan importante, sino las consecuencias que trae consigo en la convivencia diaria.

En el municipio de Tecámac, Estado de México, hace unos días fuimos testigos de una lamentable noticia, pues los vecinos de aquél lugar, se quejan, con toda razón, de que el transitar por sus calles en automóvil, se ha convertido en todo un reto. Lo anterior en virtud de que ahora sufren asaltos por parte de las personas que, en las esquinas, se dedican a limpiar parabrisas.

En Pachuca y municipios conurbados, hemos visto en redes sociales, de personas (principalmente mujeres), que se quejan, de que, en algunas esquinas, hay jóvenes y adultos, que hacen toda clase de malabares, limpian el auto con estopas o limpian parabrisas, pero al no recibir una moneda o algún pago, en algunos casos, pegan en el coche amedrentando a su ocupante.

Llama poderosamente la atención, que muchos de ellos, son “caras nuevas”, para la sociedad pachuqueña, pues quienes transitan de manera periódica por esos lugares, manifiestan que hasta hace poco, no los habían visto.

Peligroso, además de que hay quien dice que a las personas que hacen estos servicios y/o espectáculos, hoy los pretenden reclutar líderes sociales.

Hidalgo, a pesar de que hay quien hace críticas, respecto de la seguridad pública, se ha mantenido como una de las 5 entidades más seguras de México, sin embargo, este tipo de personas, que hoy usan la violencia o agreden, en caso de no tomar medidas urgentes, se irán adueñando de los espacios públicos, generando no solo malestar entre los vecinos de estos municipios, sino la incertidumbre sobre el transitar con libertad por las vías públicas.

Complejo panorama se avizora para alcaldes de la zona metropolitana, pues queda claro que no habrá quien intente obtener algún provecho, representando a estas personas que, como todos, procuran llevar un ingreso a sus hogares, pero que, para infortunio de la mayoría, algunos hacen gala de la violencia, sea física, sea moral, para obtener su ingreso.

Por otra parte, tendrán que verificar su lugar de procedencia y, aun sin ser los Ayuntamientos, una fuente de empleo, facilitar las condiciones para la apertura de empresas y negocios en sus territorios, que coadyuven a paliar la grave problemática nacional.

  • Fb: Arturo Gb / Arturo Gil Borja
  • Tw: @arturogilb

Por hoy me despido, esperando tus comentarios.

Hasta la próxima.

 

ACLARACIÓN                                                     
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *