Diciembre 2019, lo recordamos como la antesala que visibilizó en diversos medios de comunicación la aparición de un virus denominado SARS-CoV-2 que por lo menos hasta ese momento generó únicamente alerta en la comunidad de Wuhan Hubei, en China, pero fue hasta finales del mes de enero 2020, cuando Wuhan reportó de manera oficial 228 casos de neumonía causados por este padecimiento. Sin embargo, lo que realmente hizo que estas cifras y sobre todo las noticias que circulaban tomaran relevancia en distintos países, al menos en la comunidad europea y organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud, fue exactamente el 20 de enero, donde se registraba la llegada de un crucero a territorio italiano, en el que se presumía la existencia de posibles e importantes portadores de este virus.
Febrero y marzo fueron meses cruciales para países europeos derivado de la rapidez de propagación y, por lo tanto, ya se habían generado hasta el momento contagios considerables en países como Italia y España y aunado a ello continuaba el crecimiento en China, pero al mismo tiempo daba inicio la investigación del posible origen de este virus, así como la búsqueda de consecuencias y por supuesto algunas alternativas para controlar a lo que ahora identificamos como COVID-19. Si bien estos meses fueron decisivos para el continente europeo, lo cierto es que para los países de América Latina comenzaba de forma concreta la alerta y prevención para hacer frente a este importante problema.
El 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud a través de su Director General, el doctor Tedros Adhanom Ghebreysus, afirmó que derivado de los altos niveles de propagación por este nuevo brote de COVID-19, podía caracterizarse como una pandemia. Para este periodo, México ya tenía algunos antecedentes sobre el avance del SARS-CoV-2 por el mundo, por ejemplo, ya se conocían algunas de las medidas de cuidado y autocuidado a seguir para evitar la propagación, pero desafortunadamente el gobierno federal hasta ese momento no había presentado algún comunicado en el que se manifestara alguna acción a tomar frente a este reto que era inminente su llegada a territorio mexicano, por lo que fue hasta el 17 de Marzo, mediante un comunicado del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey quién en una situación histórica, determinó de forma inmediata la suspensión de actividades de toda su comunidad hasta nuevo aviso, de ahí comenzaron las acciones en los distintos gobiernos desde el ámbito federal hasta el local.
Pero, exactamente a un año de la aparición de SARS-CoV-2, ¿Cuáles son los retos y aprendizajes que no debemos dejar pasar en este primer trimestre del 2021?
El primero de ellos tiene que ver con el uso de las tecnologías, ya que hoy es claro que el uso de las Tic´s se ha convertido en la manera más eficiente de poder continuar con el desarrollo laboral y sobre todo educativo. ¿Cuál es el reto en este ámbito?, actualmente en México de acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Pública, de 226 mil 188 escuelas de educación básica reportadas, únicamente 29 mil 221 cuentan con el acceso a un equipo de cómputo o internet, lo que representa solamente el 12.9% total estimado. Esta nueva forma de aprendizaje ha implicado todo un desafío para adaptar la transmisión del conocimiento, así como la forma de aprender por parte de los alumnos. Ante este contexto es importante mencionar la relevancia del fortalecimiento de habilidades, para que los educadores, cuenten con las estrategias necesarias para cumplir aun y de forma remota la calidad educativa que los alumnos de no solo nivel básico, de cualquier nivel educativo deberían tener, pero no solo el reto es para este sector, también este aprendizaje es para los alumnos que sin duda comenzaron a experimentar una nueva forma de adquirir conocimiento, despertando de forma más visible el sentido de responsabilidad y compromiso que conlleva el ámbito educativo.
Otro de los aprendizajes más notorios, es el que tiene que ver con el denominado “home office” por sus siglas en inglés , trabajo en casa, que si bien ya existía una discusión sobre la viabilidad de trasladar algunos trabajos presenciales de forma remota, hoy ya no es una discusión, hoy ya es una realidad ya que diversas empresas y hasta los mismo gobiernos trasladaron sus labores a la vía remota de forma obligada, haciendo visible la capacidad de poder trabajar desde cualquier parte del país o hasta el mismo mundo, sin la necesidad de estar presente en una oficina en un horario de 8 horas obligatorias o hasta más, pero eso si generando las condiciones necesarias como la comunicación efectiva y el trabajo en equipo para el control de resultados.
Finalmente pero no por eso menos importante uno de los mas grandes retos es en materia de salud, ya que queda claro que el invertir en temas relacionados con la investigación científica y por supuesto lo referente al ser humano, son de urgencia para poder garantizar este derecho universal. Al día de hoy de los 126 millones de mexicanos que actualmente somos, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, únicamente se ha realizado la compra de 5 millones de vacunas, los factores son diversos que seguramente en una próxima columna analizaremos, pero la realidad es que esta pandemia no solo para México sino a nivel mundial visibilizó la calidad en los sistemas de salud y la capacidad de los gobiernos para organizar, gestionar y adaptar los mecanismos necesarios así como políticas públicas para el control de estos contagios en cada una de sus naciones y también la capacidad para poder reactivar la economía que sin duda también se ha visto afectada en los negocios y bolsillos de los ciudadanos.
Esperemos que al menos lo que resta de este año los avances en vacunas y su aplicación incremente, que los contagios continúen disminuyendo y los ciudadanos muy de la mano de cada uno de los gobiernos creemos esta corresponsabilidad que permita de una forma más certera, el control de COVID-19 en este 2021.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.
