Estados Unidos.– Una mujer con cáncer terminal decidió desafiar a los especialistas y prefirió dar a luz a su bebé rechazando quimioterápias.
Sarah Milner, de 30 años, se enteró que viviría tan solo dos años y que debía abortar a su bebé, quien se convertiría en su tercer hijo.
Según información de Daily Mail, Milner sacrificó su propia salud para salvar a su bebé después de recibir el diagnóstico de que tenía una forma agresiva de cáncer de cuello uterino a las 21 semanas de embarazo.
Cuando escuché el diagnóstico no podía creer que esto realmente me estuviera pasando. No parecía real. Estaba devastada. Debido a la naturaleza agresiva del cáncer, los médicos me aconsejaron interrumpir mi embarazo”, explicó Milner.

Finalmente, después de dar a luz a pequeño Louis, a las 31 semanas Milner se sometió inmediatamente a una histerectomía y una extirpación de ganglios linfáticos en un intento por combatir el cáncer.
Me dijeron que era la cuarta etapa y que no podían hacer nada más por mí. No podía creer lo que me estaban diciendo una vez más. Mi mundo se vino abajo por completo. La noticia me aplastó. Sabía los riesgos que estaba tomando, pero simplemente no era lo que esperaba volver de la exploración. Mis hijos, Lily-Grace, que tiene nueve años, Bobbie, que tiene siete y Louis se quedarán sin su mamá”, expresó.
