Tal como lo escribió Enzo Ferrari “El único amor perfecto en este mundo es aquel del padre por su hijo”, así de perfecto es el amor que Melissa Félix y Fabián Montibeller, sienten por su hija Melissa.
A pocos meses de experimentar por segunda ocasión la sensación de ser padres, los señores Montibeller Félix, acudieron a la parroquia de Santa Margarita para pedir el bautizo de su princesa.
Ante Dios, y convencidos de ser un gran ejemplo para Melissa,  los señores Montibeller Félix fueron testigos del agua bendita que descendió sobre la cabecita  de su heredera.
Miriam Zanella y Javier Vera, fueron los privilegiados al ser electos como padrinos de Melissa.
En la celebración bautismal, Miriam y Javier, aceptaron educar a su ahijada bajo los mandamientos de la ley de Dios.
En una íntima reunión familiar, realizada en el restaurante Rincón Gaucho, los señores Montibeller Félix, agradecieron a sus familiares por  acompañarlos.

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