Derivado de la construcción del gasoducto ramal Tula, la firma canadiense ATCO Pipeline presentó una controversia ante la Corte de Arbitraje Internacional de Londres, con la finalidad de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pague los cargos por la falta de operación.
La audiencia de procedimiento estaba programada para finales de noviembre de 2019 y solo permanecía pendiente el laudo del Tribunal Arbitral, documentó al Auditoría Superior de la Federación (ASF) como parte de la revisión de la cuenta pública 2018.
De acuerdo con el organismo, este ramal no opera por la demora en la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Según medios de comunicación, en octubre de 2014 esta empresa ganó un contrato para operar un ducto de 17 kilómetros de gas natural en Tula, con un valor de 50 millones de dólares; sin embargo, fue detenido con amparos, por lo que inició un arbitraje internacional en 2018.
Además, la construcción del gasoducto Tula-Villa de Reyes, que dará servicio a Hidalgo y San Luis Potosí, obtuvo la autorización del INAH para liberar 44 sitios, de un total de 59, aunque prevalece el rechazo social.
Los sitios pendientes por liberar son por la problemática de bloqueos en el ejido San Francisco Bojay, en Tula, derivado del grupo denominado Pueblos Unidos, así como un amparo interpuesto por el ejido Michimaloya.
A 2018, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha pagado por este gasoducto 871 millones de pesos, sin obtener algún beneficio, agrega la auditoría.
Mientras que en el gasoducto Tuxpan-Tula la Secretaría de Energía (Sener) ha demorado la aplicación de consultas indígenas en las comunidades Santa Mónica y San Nicolás en Hidalgo; así como en Chila de Juárez, San Pablito y Xochimilco en Puebla.
Según la auditoría, la CFE ha pagado por este gasoducto, que pasa por Hidalgo, Puebla y Veracruz, 499 millones de pesos también sin recibir servicio a cambio.
Las licitaciones para la construcción de los gasoductos Tuxpan-Tula y Tula-Villa de Reyes fueron ganadas por la empresa TransCanada en 2015 y supuestamente entrarían en operaciones entre 2017 y 2018.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.
